Escribo en el avión que me está llevando a Turquía, donde esta semana voy a jugar el Turkish Airlines Open, torneo en el que al final me he metido. Esto ha supuesto un cambio respecto a años anteriores, en los que mi temporada terminaba antes, pero hay que analizar con la cabeza fría y con honestidad…
Si me hubiera metido siendo 70 de la Race to Dubai realmente podría hablarse de una mejora en mi temporada, pero lo he hecho como número 93 del ranking y hay que reconocer que nada ha cambiado demasiado, ha sido un poco de rebote, aunque las oportunidades hay que cogerlas y tratar de aprovecharlas, eso por supuesto.
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El sábado pasado me comunicaron que era segundo reserva en el torneo y entonces me puse a pensar y a valorar, porque en cuanto eres primer reserva el Tour necesita que le asegures si vas a ir como tal. Tenía que analizar si realmente me convenía ir y entonces me puse a pensar: a ver, me voy a ir a Turquía sin entrenarme, porque como pensaba que no iba a entrar yo había seguido mi plan, en el que estaba previsto una semana de vacaciones después de Valderrama; con los gastos que tiene un viaje así y sin la garantía de jugar el torneo… Así que al principio estaba más cerca del NO, que del SÍ. Pero luego lo vi desde otro punto de vista: en caso de que vaya y al final no juegue, me tomo la semana de Turquía como una de entrenamiento, trabajo duro allí y ya está. Por tanto, hubiera ido como primer reserva, pero al final todo ha salido aún mejor, porque voy a jugar.
A partir de aquí, os cuento. Mi plan antes de saber que jugaba este torneo era descansar y luego ponerme a trabajar duro pensando en jugar cuatro torneos seguidos antes de Navidades y a partir del 22 de noviembre, que son el inicio de la siguiente temporada del circuito europeo, comenzando por Hong Kong, Mauricio y acabando con los dos de Sudáfrica, el Open de Sudáfrica y el Alfred Dunhill. Si resulta que juego bien en Turquía y me puedo meter en el Nedbank, otro Rolex Series, entonces habrá que ir viendo la posibilidad de hacer algún cambio a este plan, y no digamos si además consiguiera meterme en la Final de Dubai.
Lo dicho: me tomo este torneo en Turquía como una bola extra, un segundo servicio o como queráis llamarlo. Soy muy malo haciendo cuentas, entre otras cosas porque nunca las hago, pero quizá necesite algo así como un top-5 para meterme en el Nedbank. Es muy complicado. Mucha gente me ha dicho que el simple hecho de ir sin expectativas, como algo que no estaba previsto, quizá me vaya bien… Ya veremos.
