Primer top ten en Estados Unidos. Qué puedo decir. La semana pasada en Alabama todo fue genial…
Por fin le estoy pegando a la bola como yo suelo pegarle. La verdad es que he pasado una rachilla pegándole regular, pero parece que todo vuelve a estar en su sitio (Jaja). También estoy pateando bastante cómoda, así que me encuentro con mucha confianza.
Os podéis imaginar cómo fue la última jornada del Bell Micro… Sinceramente, ni se me pasaba por la cabeza estar en la penúltima partida tan pronto. Fue una pena no poder terminar el torneo. Estaba con mucha confianza y, sobre todo, con muchas ganas de jugar porque nunca había estado tan arriba en América, pero el tiempo no nos dejó… Qué le vamos a hacer… No obstante, en general, estoy contentísima con mi cuarto puesto, ¡¡así que no me voy a quejar!! (Jajaja).
Tampoco me esperaba estar tan pronto entre las 100 mejores del mundo. No me gusta hacer números, pero sí mirarlos, y, la verdad, estar entre las 100 mejores me hace sentir muy orgullosa y querer trabajar aún más para ir subiendo poco a poco.
Ahora estoy en el Sybase. Todavía no he jugado el campo porque llegué ayer por la tarde-noche, pero tiene una pinta… Imaginaros. Es uno de esos recorridos que parece una alfombra y árboles enormes… de los que nada más verlos ¡¡te enamoras!! (Jajaja).
Hoy ya jugaré el campo. Estoy esperando a mi caddie que el pobre perdió la conexión del avión y ha tardado un poco más en llegar. Hoy está lloviendo, pero parece que para el torneo el tiempo será bueno. ¡¡Tengo muchísimas ganas de empezar ya a jugar!!
El torneo es match play y la ceremonia de los emparejamientos es curiosa. Las 32 primeras cogen números de un bombo y esa es contra la que juegan. El match play es una modalidad que me gusta mucho y se me ha dado muy bien cuando era amateur. ¡¡Así que espero que siga siendo así!!
Ya os iré contando…
