Jordan Spieth acaba de ascender en el escalafón de las leyendas de la historia del golf. Ya tiene tres Grandes y por delante de él, partiendo de Nicklaus (18) y Tiger (14), ya ‘sólo’ le superan 28 jugadores, de los que únicamente cuatro están en activo, obviando maravillosos y sorprendentes sucesos como el que estuvo a punto de culminar Tom Watson en Turnberry 2009. Son Tiger Woods (14), Phil Mickelson (5), Ernie Els (4) y Rory McIlroy (4). El retorno de Tiger, la verdad, sigue siendo una gran incógnita. Por edad (41), dignidad y gobierno aún debemos contar con él, pero de momento hay que dejarlo entre paréntesis. Mickelson y Els, por su parte, han entrado o van entrando en una fase descendente, más el sudafricano que el californiano. Queda Rory.
Dejemos por ahora a un lado las estadísticas que tratan de hacernos ver quién le pega más fuerte, más recto, quién caza más greenes, enchufa más putts o recupera mejor. Solamente, amable lector, conteste a la cuestión que se formula en el titular. Jordan Spieth o Rory McIlroy: ¿quién es mejor y llegará más lejos?
En realidad, son dos preguntas. A la primera, quién es mejor, reconozcamos que la mayoría suele responder a bote pronto que Rory McIlroy. Es más poderoso y su calidad de bola es superior, aunque el texano sea un pateador letal y su juego corto sea tan espléndido como el que más. Cuesta imaginar una versión ‘B’ o ‘C’ de Spieth terminando en cuarto lugar en un British, que es exactamente lo que ha ocurrido con McIlroy esta semana en Royal Birkdale…
Digamos que, puestos ante la total y absoluta plenitud de ambos, Rory es mejor.
Lo que no significa, en mi modesto entender, que vaya a llegar más lejos. Spieth gana a los puntos, pero de largo, la batalla de la ambición deportiva y el deseo de triunfos y gloria. Dicho de otro modo: Rory aguarda el éxito y Jordan sale en su busca. Y no hay en el comentario desconsideración alguna hacia el norirlandés, ni se insinúa que su trabajo o dedicación no sean notables. Son sencillamente modos de ser y estar en el mundo distintos, que imprimen caracteres y afanes distintos.
No duda de la calidad y superioridad de Mcilroy cuando ambos están a su maximo nivel.
Pero cuando no están ansu maximo nivel yo veo las cosas un poco diferentes. Diría que la versión C de Mcilroy solo la vimos los primeros hoyos de la primera jornada. En mi opinion Mcilroy tiene la capacidad de volver a llevar su juego al maximo como hizo en el TPC de Boston en 2016.
En cambio, yo creo que Spieth consigue sacar el maximo de cuando su juego está en versión B o C. No hay mas que ver sus tees de salida los ultimos nueve hoyos. O haciendo referencia a otro campeonato, no hay más que recordar lo mal que estaba su swing en el Masters de 2016 y todo lo que pudo sacar de ello. (En este summit Butch nombra la brillante actuación de Spieth en ese Masters teniendo en cuenta lo mal que le estaba pegando a la bola: https://www.youtube.com/watch?v=Vrz2KakxV20 )
Mcilroy es capaz de mucho más y Spieth es muy bueno haciendo resultado.