Inicio Blogs El Ala Este del PGA Tour Un aniversario con susto

Un aniversario con susto

Compartir

¡Hola a tod@s!

Hoy se cumplen dos años desde aquel día en que pusimos rumbo a Miami a nuestra nueva vida. Dos años llenos de momentos felices, de experiencias nuevas, y por qué no decirlo, también de momentos difíciles que nos han unido más como familia, y nos han hecho valorar aún más la suerte que tenemos de estar viviendo el sueño americano.

Dos años desde aquella fecha que jamás olvidaremos: el 11/12/13. Recuerdo con total nitidez los sentimientos encontrados que tuve aquel día: ilusión, alegría, nervios, cierta tristeza… Los dos éramos plenamente conscientes de que cerrábamos una etapa de nuestras vidas y comenzábamos otra, y en situaciones así, diría que es casi inevitable sentir cierto vértigo. Pero estábamos plenamente convencidos de nuestra decisión, y a pesar de que castigué al pobre Gon con cientos de lágrimas durante el vuelo, sabíamos que estábamos haciendo lo correcto. Su sueño siempre ha sido el PGA Tour, y nuestro sitio estaba allí.

Desde aquel día no hemos vuelto a mirar atrás. No ha sido nuestro año, pero de todo se aprende, y con el tiempo recordaremos el 2015 como un año que nos enseñó mucho y nos hizo madurar. Estamos felices y totalmente integrados en nuestra vida americana, hemos conocido a gente maravillosa por el camino, y esperamos quedarnos mucho tiempo aquí.

En las últimas semanas Gon no ha tenido torneos y, aprovechando su descanso, recibimos la visita de mis padres, que han pasado casi dos semanas con nosotros. Los niños han estado felices con sus abuelos en casa y nosotros aún más con lo mucho que nos han cuidado. El último día tuvimos un altercado que nos impidió despedirnos de ellos, ya que la pobre Alicita se partió el labio y acabó necesitando que un cirujano plástico le diera diez puntos para recolocárselo. Por suerte ya está mejor, pero tuvimos que pasar casi siete horas en el hospital y los pobres se fueron con el mal cuerpo de no saber como había salido la intervención hasta que no aterrizaron.

Aprovecho para agradecer el trato recibido en el Nicklaus Children’s Hospital de Miami, una institución que recibió el nombre de la leyenda del golf poco después de que su Fundación donara 60 millones de dólares al mismo. Desde el momento en el que entramos recibimos todo tipo de atenciones para hacer nuestro paso por urgencias más llevadero, hasta el punto de que justo antes de que anestesiaran a Ali, llegó una ‘animadora’ que la distrajo para que no fuera consciente de lo que estaba pasando. Nos ayudó muchísimo a tranquilizarla (¡y os aseguro que eso no es nada fácil!).

Por suerte todo salió bien y Gon se pudo ir el lunes rumbo a West Palm Beach, donde esta semana disputa un torneo de la escuela del Web.com que le podría permitir mejorar su posición en el mismo para el año próximo. Así que, como siempre: ¡¡¡#GOGON!!!

¡Muchas gracias por leerme y hasta la próxima entrada!