Inicio Blogs Firma Invitada Jason Day: un swing de Champions League

Jason Day: un swing de Champions League

Compartir

Análisis en profundidad del swing de Jason Day, desde el Box de IH

El piloto entra en boxes y todo el mundo aplaude, este piloto no es un cualquiera, este torneo no ha sido casualidad.

Jason cada vez que pisa un «major» apunta maneras de que está lo suficientemente a gusto en pista como para liar «el taco»… Y esta vez lo hizo con el WGC Accenture Match Play 2014.

Qué decir del torneo en el que todo el espectáculo vino de golpe cuando Dubuisson (otro que pronto ganará algo grande porque ve trazadas que otros no ven…) se entretuvo en hacer cosas mágicas en los alrededores del green e involucrar a todos los espectadores del mundo en un pensamiento común: «joder… lo que ha hecho ese tío! ¿Eso es suerte? ¿Magia? ¿Se hace queriendo? ¿Es justo eso para el otro? Jo, jo… el golf y la madre que parió».

Y es que volviendo al piloto ganador: «siempre está arriba y esta vez llegó a lo más alto».

Y es que si sumamos factores entre piloto y coche rápidamente descubrimos que el piloto ha ido a lo largo de su carrera de menos a más… controlando los tiempos… enseñando poco a poco lo mejor de él hasta llegar al torneo en el que se comenzará a escribir su nombre en mayúsculas.

Mientras que por otro lado todo aquel que se pare a chequear el estado de su coche (swing) pronto verá que este piloto juega con ventaja, este swing va a otro nivel, lo que viene siendo «Champions League».

Este swing no tiene fallo, es sólido, es regular, sus márgenes de error apenas se pueden identificar y por el contrario el control de su cuerpo para generar velocidad en el golpeo de su bola defiende en todo momento un control de la estabilidad prácticamente perfecta.

Este jugador, cuando se equivoca, su bola se convierte en algo más que una bola comercial…. Como a los jugadores del tour les dé por «mimetizar» el swing de Jason quizás veamos a Pete Cowen o Sean Foley en la cola del INEM.

¿Por qué tantos elogios al swing de Jason? Cuando analizamos la técnica buscamos encontrar «fugas» en dos líneas diferentes:

1. Margen de error

2. Velocidad

Un jugador para marcar una línea de trabajo en su swing debe querer que sus golpes malos sean los más «comerciales» posibles (menos dañinos a su resultado) y sus golpes buenos sean los más largos posibles (acortar el campo y transformar un par 5 en par 4). Partiendo de este criterio, este jugador nos muestra una combinación totalmente inviable para la mayoría de los mortales.

Y por ello de ante mano pido mis disculpas a los lectores por la complejidad de los detalles que van a ver a continuación pero es que una bola de golf que se golpea a alta precisión en un swing como este ¡lo merece!


EL SWING DEL CAMPEON JASON DAY EN EL «BOX DE IH»:

Uso del cuerpo para obtener máxima velocidad en el área del impacto con el palo de golf: 


El jugador se posiciona con su columna en posición erguida para no limitar las rotaciones de su cuerpo y de este modo poder generar un movimiento en el que el palo de golf se traslade alrededor de la columna generando así la máxima fuerza centrifuga, para obtener esa energía el jugador genera un movimiento de rotaciones en idas y vueltas sobre su columna y marca una flexión de piernas para que esa rotación no se vea limitada en la zona inferior de su columna.

A su vez, sus brazos se posicionan de forma extendida para que de este modo pueda usar sus extremidades como palancas de fuerzas que incrementen al máximo la velocidad del palo, usando como una de las bases de ese incremento la longitud de sus brazos para generar la energía a través de palancas obtenidas en hombros, brazos y muñecas. 



AHORA COMIENZA LO DIFICIL, PERO JASON LO BORDA…
comienza a ejecutar su «backswing» moviendo primero sus hombros para después de forma progresiva obtener las palancas de fuerzas en el orden de hombros (líneas rojas), brazos (líneas rojas) y finalmente manos (líneas azules).



EL TOP DEL SWING EN EXTENSIÓN MUSCULAR MÁXIMA:
esta subida en la que el palo de golf no es capaz de llegar a un paralelo con el suelo, nos cuenta cómo el jugador está sometiendo a su cuerpo a una extensión muscular tan óptima (gracias al orden de movimiento que se citó en el fotograma anterior) que es donde convergen el rendimiento de la pegada y el control del jugador (por lo que pueden olvidar el swing de Daly o los jugadores de Long driver).

Y como curiosidad… piensen cuántos amigos suyos pegan muy fuerte pero suben poco el palo, y ahora piense en el típico amigo que pega muy poco pero sube el palo más que nadie…


INICIO DEL BACKSWING DESDE LA PARTE MÁS ALEJADA DEL PALO, LAS PIERNAS:
En el inicio de la bajada podemos ver cómo las líneas amarillas de las piernas es la primera en llegar a su posición de inicio (porque ya volvió), le seguirán las caderas, luego el pecho, luego los hombros… 


MÁXIMA POTENCIA EN EL ÁREA DE IMPACTO:
La fuerza centrífuga generada por el giro de su cuerpo hace que las extremidades (brazos) trabajen por detrás de la posición del pecho y esto hace que la acción de las palancas de fuerzas de los brazos y muñecas se mantengan hasta el último momento, obteniendo así un incremento de la velocidad en el área del impacto y, a su vez, creando un impacto entre ángulo de ataque de la cabeza del palo contra la bola y ángulo de impacto de la cara del palo (loft dinámico) óptimo para el traslado de la energía del palo a la bola. De este modo, obtiene una parábola de máxima distancia y control.

De este modo se obtiene una extensión completa de los brazos totalmente post-impacto, siendo esta imagen la principal culpable de la famosa frase «hay que sacar los brazos».


«ESTE SWING SABE USAR CADA PARTE DEL CUERPO DEL JUGADOR PARA GENERAR LA MAXIMA VELOCIDAD EN EL PALO DE GOLF Y EN EL LUGAR DE LA BOLA»


Control del cuerpo para obtener máximo rendimiento:

1. BACKSWING


El jugador coloca su cuerpo posicionando su columna en una posición erguida que marca un ángulo de 90 grados con la posición de la bola (el suelo), logrando de este modo que, si consigue mover el palo a máxima velocidad, éste estará a la merced de la energía que despide el giro de su columna (fuerza centrífuga) y conseguirá que el palo de golf se mueva en un plano perpendicular con la columna (obteniendo los 90 grados de ángulo de la posición inicial). Así, consigue «orbitar» alrededor de dicha columna haciendo coincidir la cabeza del palo con el lugar en el que reposa la bola.

En el fotograma superior podéis observar el swing de una forma convencional, sin embargo en el fotograma del medio apreciamos, a través de la perspectiva que usamos en el «Box de IH«, cómo la bola de golf está conectada con la columna del jugador en un ángulo de 90 grados (observando la unión de la línea amarilla con la línea azul).

Posteriormente, en las imágenes que le siguen se observa como el backswing es completamente «fiel» por parte de su palo de golf, brazos y muñecas con el plano horizontal (línea roja), posicionando al palo en un lugar de partida para comenzar el lanzamiento de la bola, desde un punto perfecto, que no requiera de compensaciones para obtener un golpe certero.

Finalmente, en la última línea de fotogramas se puede observar cómo el jugador desarrolla con sus piernas y torso un movimiento puramente rotativo, que le proporciona una estabilidad perfecta y por la que consigue que el punto de la columna (círculo azul), conectado con el lugar donde reposa la bola (línea amarilla), esté siempre en el mismo lugar, haciendo que el jugador obtenga un estiramiento muscular sin variar su posición frente a la bola, para luego poder impactarla correctamente y obtener un control del ángulo de ataque.

2. DOWNSWING

Esta bajada a alta velocidad hace que el palo de golf quede a merced de la inercia creada por el desgiro de su cuerpo y la órbita alrededor de la columna del jugador, en una perpendicularidad que de forma muy regular hace estrellar la cabeza de su palo contra el lugar de la bola en el ángulo deseado, en la línea que está situada la alineación de su colocación y con la cara de palo / lie en posición optima para hacer llegar la bola hacia el objetivo deseado.

En el fotograma del medio desde la perspectiva usada en el «Box de IH», podemos observar (a través de las líneas de color blanco) que en todo momento la velocidad del downswing generada por el desgiro hace que el palo de golf «orbite» alrededor de la columna a alta velocidad, haciéndole chocar con el lugar de la bola durante su recorrido alrededor de la columna del jugador.

Al observar la última línea del fotograma se aprecia cómo la alta velocidad del downswing se genera alrededor de la posición de la columna frente al lugar de la bola y por ello consigue generar un paso por bola de máxima potencia sin distorsionar la estabilidad del jugador.

NOTA: Se recuerda que la columna queda pegada a la zona posterior del torso y por ello el círculo azul (mirar últimas líneas de fotogramas) pasa de verse del centro del abdomen al lateral del cuerpo según la imagen, siendo esos lugares los puntos en los que se encuentra ese eje de la columna que ha actuado de centro del movimiento.


Por Iván Hurtado

«JASON DAY OBTIENE DE SU VELOCIDAD SU MÁXIMA ESTABILIDAD: EL CONJURO PERFECTO QUE TODO BUEN ENTRENADOR TRATA DE HECHIZAR EN SU JUGADOR»

Contrate clases con Iván Hurtado en: www.ihgolfacademy.com