Una estrategia realista
Una idea a la que conviene recurrir cuando nos acercamos al tee del 1: hay que ser conscientes de las limitaciones de nuestro juego. O lo que es lo mismo: dar importancia a la estrategia. Pasamos muchas horas tratando de mejorar nuestros movimientos, pero luego hay que tratar de ponerlos en práctica de acuerdo a una estrategia realista. No lo olvidemos: los defectos que tengamos en el swing se pueden minimizar con una buena estrategia.
Ejemplos concretos de una buena estrategia para un jugador de handicap medio-alto:
1. No sucumbir siempre a la tentación de la distancia. Hay que saber sacrificar hierros largos o maderas a cambio de golpes rectos y más cortos que nos mantengan en calle.
2. Cuando nos encontremos en un bunker de calle, no olvidar que lo principal es salir de ahí… Por ejemplo: si estamos dudando entre un hierro 6 y un 7, quedarnos siempre con el 7. Tener en cuenta la altura del talud.
3. Vamos a dejar los golpes imposibles a los profesionales de alto nivel. Muchas veces, ofuscados por un error (estamos fuera de calle, entre los árboles…), multiplicamos sus efectos negativos con otro error más. ¿No es mejor casi siempre salir a calle de nuevo?
4. Olvidarnos de ciertas posiciones de bandera y jugar a centro de green.
5. En un rough espeso, hierros muy abiertos. Si no es muy espeso puede valer un híbrido, pero es mejor ‘aparcar’ los hierros largos y las maderas cerradas.
6. Duele mucho patear tres veces en determinadas circunstancias. Una regla general: en putts de entre 2 y 5 metros de distancia al hoyo hay que mantener la cabeza fría y buscar el equilibrio entre la agresividad (vemos que podemos embocar de uno…) y la puntuación de nuestra tarjeta, porque en esas distancias usted es capaz de embocar de dos casi siempre si le ‘ordenan’ hacerlo así, y sin embargo, ¿cuántas veces terminamos un recorrido y hemos ‘tri-pateado’ en varios hoyos a dos, tres, cuatro o cinco metros?
7. Por último, y aunque parezca una obviedad: el handicap de cada jugador no es ningún adorno… Dicho de otro modo, si usted es handicap 18, le vale con un bogey en cada hoyo, y si es 36, le vale el doble bogey.
(Basado en un artículo publicado por Lucas Montaner para la Revista 'Hoyo 19' del Real Club de Golf de Sevilla, resumido y puntualizado por el autor para Ten-Golf).
