Diciembre. Tiempo para estar con la familia, desconectar, descansar, hacer balance y, por supuesto, trabajar también. Hay que preparar el próximo año. Queda menos de un mes para Abu Dhabi y hay que estar listos para cuando empiece la acción.
Mirando atrás creo que ha sido una buena temporada. Diría que ha sido un año bueno sin ser brillante. He jugado bien al golf y he tenido algunos resultados muy buenos, como por ejemplo, el tercero en el WGC México Championship o haber pasado todos los cortes en los Majors. En los ocho torneos más importantes del año no me pudo reprochar nada. Esto en el capítulo del haber.
Diría que ha sido un año bueno sin ser brillante. He jugado bien al golf y he tenido algunos resultados muy buenos
En el debe, admito que me hubiera gustado ganar algún torneo, jugar la Final de la FedEx Cup y la Ryder Cup, ya fuera clasificándome o con invitación. Pero no pudo ser y sinceramente es lo que más pena me dio. Me ha faltado un poco de fortuna para ganar algún torneo y haberme metido en el top 20. De todos modos, mantenerme en el top 30 sin haber ganado ningún torneo creo que habla de mi constancia. Dice cosas muy buenas.
Lo que más pena me dio fue no jugar la Ryder Cup
En cualquier caso, para mí ganar no define una temporada. Es un plus, pero no voy a valorar un año completo sólo por las victorias. Mi objetivo es intentar meterme entre los diez primeros del mundo en los próximos meses. No estoy tan lejos. En realidad, con una victoria en un torneo importante o dos triunfos en eventos como el Open de Escocia lo podría conseguir. Es el sueño.
Voy a intentar ganar diez o quince metros desde el tee. Creo que con mi precisión me podría ayudar a dar un salto importante
Para el próximo año voy a trabajar duro el putt y el juego corto, que no han sido lo suficientemente buenos. También voy a intentar ganar diez o quince metros desde el tee. Creo que con mi precisión me podría ayudar a dar un salto importante. Quiero dejar claro que no voy a cambiar el swing ni nada de eso. Pienso que una de mis grandes virtudes es que tengo un ritmo muy bueno y quiero que siga siendo así, pero sí le quiero meter una chispa, un plus de velocidad o explosividad. Y no en todos los golpes. Sólo en momentos concretos donde yo vea que me puede venir muy bien, por ejemplo, en los golpes de salida en los pares 5. En el fondo es meterle una sexta marcha a mi swing.
Volveré a jugar en Abu Dhabi, luego estaré en Dubai y lo siguiente será ya centrarme en Estados Unidos hasta el US Open
A mí ya sabéis que nunca me atrajo pegarle fuerte ni más que nadie. Sin embargo, en el último PGA Championship, por ejemplo, hubo pocos jugadores que pegaran más corto que yo. Así está el golf en la actualidad y hay que adaptarse. Los campos, sobre todo en Estados Unidos, se preparan para los pegadores, con calles de 60 metros de anchura y tienen cierta ventaja jugadores como Dustin Johnson, Justin Thomas o Brooks Koepka. Ojo, que son grandísimos jugadores y no es una crítica en absoluto, sino una realidad. Para golfistas como Jordan Spieth está más difícil.
Como os he dicho, volveré a jugar en Abu Dhabi, luego estaré en Dubai y lo siguiente será ya centrarme en Estados Unidos hasta el US Open. Ya iré viendo qué torneos juego, pero esa es la idea.
¡¡Feliz Navidad a todos!!
