Jordi García Pinto se retira. A los 27 años, el jugador gerundense ha tomado una decisión tan difícil para cualquier deportista de alto nivel como meditada. Cuelga los palos y se dedicará en cuerpo y alma a su profesión, la abogacía, donde confía en encontrar un hueco que aún le permita estar cerca del golf, su gran pasión.
Jordi tenía previsto jugar esta semana el Campeonato de España de Profesionales en el recorrido Augusta Golf de Calatayud, sin embargo una molestia en la muñeca tras un leve accidente doméstico ha precipitado su decisión. Aunque no ha sido nada grave, sentía que no estaba al ciento por ciento para salir a competir y ha preferido retirarse. Por su actual clasificación en la Road to Omán ya no tenía opciones de entrar en los torneos finales del Challenge Tour, por lo que su último torneo en activo ha sido el Challenge de España de la semana pasada en Izki, donde no le fueron demasiado bien las cosas.
Evidentemente, cuando hablamos de golfistas, como los toreros, y mucho más siendo tan joven como García Pinto, la retirada siempre hay que ponerla entre comillas. En cualquier momento podría jugar un torneo, incluso de algún circuito menor, más local, o algún Pro-Am puntual. Eso no se lo va a quitar nadie. Lo que sí tiene claro Jordi es que a partir de ahora va a orientar su vida profesional por otro lado. Al menos, de momento, que la vida de los golfistas, como todos saben, es muy larga.
La decisión no ha sido fácil, pero tampoco ha caído de la noche a la mañana. “Llevaba mucho tiempo dándole vueltas a la cabeza. Hace dos años ya estuve pensando en dejarlo, pero me reenganché y así he seguido dos años más, pero ya he dicho basta. Es algo definitivo. Me encanta el golf, es mi pasión, pero en los últimos tres años no lograba disfrutar en el campo de golf, había más frustración y aburrimiento que otra cosa. No me lo pasaba bien y la competición es muy dura como arrastrar todo esto durante tanto tiempo”, comentaba Jordi a Tengolf esta misma tarde.
El Challenge Tour es el circuito que más gloria ha dado a Jordi. No en vano, ha ganado dos torneos (Najeti Hotel St. Omer 2014 y Barclays Kenya Open 2013) y ha sido uno de los Graduados españoles en los últimos años, es decir, logró la tarjeta del European Tour a través del Challenge. Sin embargo, es cierto que la segunda división del golf europeo es dura cuando la cosas no salen rodadas. “Es mucho viaje, muchos días fuera de casa y mucho dinero invertido para que las cosas no vayan bien en el campo. Yo me he saturado. Igual hay otros jugadores que saben llevar esta situación mucho mejor, pero yo he decidido que no puedo más, que tengo otras cosas que puedo hacer en mi vida y me voy a volcar en ellas”, asegura.
No es habitual ver a un jugador de golf profesional tomando una decisión tan drástica con apenas 27 años y con una buena carrera a sus espaldas, con victorias en el Challenge Tour, habiendo tenido la tarjeta del European Tour no hace tanto y habiendo llegado al puesto 220º del ránking mundial. Pero García Pinto siempre ha sido un jugador de ideas claras y que ha tomado decisiones en su carrera, aunque fuera difíciles. Por ejemplo, se pasó muy pronto a profesional, después compaginó el golf con sus estudios y hasta renunció un año a jugar la Final de la Escuela del European Tour por centrarse en el Challenge porque sentía que era lo mejor para su carrera. Así que, desde luego, ante todo, ha sido una decisión meditada y consecuente. Sólo queda desearle toda la suerte del mundo en sus próximos objetivos.
