John Daly ha dado un amable golpe sobre la mesa. Cómo y dónde es mejor hacerlo: en un campo de golf…
El exuberante jugador norteamericano ha lanzado hoy un serio aviso a quienes pensaban que venía sólo a pasearse.
Maticemos: un Pro-AM tiene poco que ver con la competición oficial. La tensión no es la misma y el grado de relajación invita a hacer pocas. Pero sí nos da pistas del estado de forma y del 'feeling' de un jugador con el campo.
Dicho esto hay que afirmar rotundamente que John Daly se siente en el Real Club de Gol de Sevilla como en su casa. Por muchas cosas: en primer lugar ya apuntábamos sus declaraciones acerca de lo cómodo y a gusto que se encuentra en Europa; pero es que además, mientras jugaba el recorrido andaluz (acabó segundo el Pro-AM, sólo superado por el equipo del sueco Edfors) aseguraba que el Real le recuerda mucho a su campo de Palm Springs, en California. Los pinos, las palmeras, el paisaje, el diseño… Todo le traslada al club del que es socio en Estados Unidos. Por si fuera poco, Daly ha podido sacar el driver en todos los hoyos. Y cuando decimos todos, es todos.
Un dato: al paso por el green del 16, se quedaba mirando prendado a una de las casas que rodean al campo. Preguntó por el precio y quedó realmente interesado.
Sus comentarios sobre el recorrido sevillano también fueron muy buenos. "Es un campo maravilloso, me gusta mucho", señalaba mientras paseaba por la calle del hoyo 12.
Su tarjeta es fiel reflejo de lo bien que se sintió ayer. Hizo cinco birdies en los primeros nueves hoyos y un solo bogey al 6. En los segundos nueve comenzó al mismo ritmo hasta toparse con el agua en el 14. Era un tiro delicado desde búnker. Pero a Daly le da lo mismo y apuntó a bandera. Se fue al lago y firmó un doble bogey. Sin embargo, se recuperó con birdies al 16 y al 17, dejándose alguna otra buena opción por el camino.
