Esta vez sí, Joakim Lagergren (-16) ha sido capaz de ganar. Otro sueco primerizo, como Bjork hace un par de semanas. Ha tenido que ser en el Rocco Forte Open, torneo menor del circuito europeo, pero poco importa la talla del evento cuando de estrenarse se trata…
El taciturno escandinavo superaba en el primer hoyo de desempate a otro que llevaba aún más tiempo en busca de ese primer galardón, el francés Mike Lorenzo Vera (-16). Lagergren, que había conquistado el liderato en el meridiano de la jornada, con un potente parcial de cuatro menos en los nueve primeros hoyos, después se fue difuminando, para acabar a lo grande, con un birdie fantástico nada más comenzar el play off que dejaba sin margen de reacción al galo. Hace poco más de un año ya había perdido un torneo en un desempate (en Qatar, ante el coreano Wang), pero esta vez no lo iba a dejar escapar, para desesperación de Lorenzo Vera, a quien un oportuno y excelente birdie en el 17 había metido de nuevo en la pelea.
Buena vuelta final de Pep Anglés (-8) de 68 golpes, aunque la jornada tuvo al birdie como protagonista en tierras sicilianas, sobre todo en la zona caliente de la tabla, y la tarjeta apenas le valió al catalán para incluso perder un par de posiciones. Lo importante, en todo caso, es que este es el mejor resultado del catalán en la presente temporada (terminaba 14º) y puede servir de lanzadera para próximas citas. Scott Fernández (-4) también entregaba un 68 en la ronda final, en su caso con una valiosa tarjeta libre de bogeys, mientras que Emilio Cuartero (-1) pagaba muy caro un mal comienzo de vuelta (triple bogey en el 1 y bogey en el 2), a pesar de haber reaccionado después con energía (vuelta de 73).
Al fin una generación de veinteañeros suecos dispuesta a alzar la voz
El triunfo de Lagergren se une al de Alexander Bjork en China y al de Oscar Lengden en el Challenge de España, todo en apenas tres semanas. No se trata de Grandes ni de campeonatos del mundo, es evidente, pero ganar siempre es muy complicado (que se lo pregunten a Lorenzo Vera o al propio Lagergren) y el golf sueco está enchufado y de enhorabuena.
