Retief Goosen (-20) partirá mañana como líder en solitario tras el final de la tercera jornada del Portugal Masters que se disputa en el Oceanico Victoria Golf (Vilamoura, El Algarve)…
El arreón del sudafricano (64 golpes hoy, -8 en el día) no nos coge por sorpresa, en vista de los registros que se están dando en este recorrido en una apacible semana meteorológica. Todos los días hemos visto a algún grupo de jugadores que ha conseguido sacarle todo el jugo a las condiciones de juego: buenos greenes, calles anchas y un rough que tampoco penaliza demasiado en el fairway. A pesar de las ‘facilidades’, sí llama más la atención que Goosen haya encadenado dos 64, el viernes y el sábado… De sombrerazo.
Pablo Martín (-16) sigue ahí. No ha tenido un día especialmente brillante (68 golpes y un buen cuarto puesto), sobre todo desde el tee, donde se ha mostrado un poquito más acelerado que en jornadas anteriores. Pero su juego no se ha descompuesto, más bien al contrario, y lo cierto es que no se le han visto fisuras. Le falta romper en todas las parcelas para destrozar el campo, como ya han hecho varios de sus rivales… ¿Será mañana? No seremos nosotros quienes lo descartemos, desde luego.
El malagueño, en todo caso, debe salir este domingo mirando al líder. Con agresividad y valentía, sin pararse a pensar en ese ‘puñado’ de euros que le restan por sumar para amarrar la tarjeta de 2010 (calculamos que con 25.000 euros más podría ser suficiente). Quizá esa sea la clave: salir a dsifrutar junto a Lee Westwood, ni más ni menos, en el penúltimo partido del día, justo por delante de los líderes (Goosen y Molinari).
Pablo, que cerraba su vuelta con un gran putt de unos ocho metros de birdie en el 18, ha hecho hoy su primer bogey del torneo. Sólo uno en 54 hoyos. Sin duda, un dato que habla por si solo de su consistencia. Un segundo puesto (saldrá mañana a tres golpes de esta posición) lo metería además en la final de la Race to Dubai.
¿Nos aventuramos con un pronóstico de resultados? No se pierde nada: si se mantienen las condiciones de juego, es probable que Pablo necesite como mínimo un 65 para aspirar a la victoria o al segundo puesto. Y de ahí, para abajo… Son palabras mayores, y hasta causa pudor citar semejantes registros como quien no quiere la cosa, pero se ha venido demostrando que en la parte alta de la clasificación, un 69 o 68 apenas te permite moverte; el propio Martín salió hoy 4º, misma posición en la que ha acabado. De hecho, entre los ocho primeros clasificados, todos menos Martín y Westwood han firmado alguna tarjeta de 65 golpes o mejor…
Su compañero de partido, Álvaro Quirós (-12) ha patinado, igual que Padraig Harrington (ambos han entregado tarjetas de 71 golpes), sin duda dos de los favoritos para el fin de semana. Pues eso: que los tarjetones no están todos los días al alcance de todos; hay que jugar bien para firmarlos.
Quirós ha cogido menos greenes y, sobre todo, ha recuperado peor que diás atrás cuando no los ha cazado. Un doble bogey en el hoyo 7 lo dejaba muy tocado (dos bogeys más en los tres siguientes hoyos), aunque por los segundos nueve protagonizaba una meritoria remontada (cuatro birdies entre los hoyos 11 y 17).
No sería mala idea seguir mañana el partido del de Guadiaro, porque estamos seguros de que saldrá en plan ‘kamikaze’ en busca de ese 62 que vuelva a dispararlo… Si atina con los primeros putts, seguro que da espectáculo del bueno.
Alejandro Cañizares (-11) se ha quedado finalmente a unos tres golpes de su objetivo, que es meterse en un buen puesto de top-ten para sumar una buena cantidad que le acerque la tarjeta. Necesita otro gran día. Pero está en su mano. En todo caso, está mostrando temple, sangre fría y determinación. (CRÓNICA DE LA MAÑANA)
Pablo Larrazábal (-11) está haciendo un gran torneo. Necesita semanas como ésta, de desahogo, para recuperar esa alegría que caracteriza a su juego.
Lástima de ese hoyo 9, que se ha convertido todos los días en su principal obstáculo para estar luchando ahora por las primeras plazas: dos bogeys y un doble bogey en las tres jornadas (si bien hay que aclarar que este par 4 de más de 400 metros se está jugando como uno de los más complicados del campo).
De Rafael Cabrera Bello (-10) vamos a quedarnos con su impresionante final de hoy: cinco birdies consecutivos en los últimos seis hoyos (birdies al 13, 14, 15, 16 y 17)… Muy en la línea de juego e inspiración de aquel fabuloso domingo en Austria.
