Inicio Grandes Circuitos Ladies European Tour El virus inclasificable, un plan acertado y la sombra del jet lag
Azahara muñoz y carlota Ciganda sortean los obstáculos y pelearán por la victoria durante el fin de semana

El virus inclasificable, un plan acertado y la sombra del jet lag

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Una, Carlota Ciganda (-3), salió encendida: birdie en el hoyo 1 y un gran eagle en el 4. Otra, Azahara Muñoz (-6), ya se temía lo peor desde que pegó el primer golpe en el campo de prácticas una hora antes de salir a jugar. No daba una a derechas y poco después se confirmaba el estropicio en el campo: bogey en el 1, un buen par en el 2, bogey en el 3…

Carlota siempre prefiere jugar en el turno de tarde, como hoy. Aunque está más que acostumbrada, sigue sin cogerle el gusto a madrugar. El jueves, además, se sentía algo cansada antes de comenzar la competición. Hoy, sin embargo, estaba pletórica en el tee del 1, pero en los últimos hoyos de la ronda anduvo algo desconcentrada, según cree. En todo caso, el plan trazado consistía en no volverse loca, no tratar de hacer el birdie antes de jugar el hoyo, que es un poco lo que le ocurrió en la primera jornada. Las ganas de agradar y de ganar ante la afición española, que a veces se traducen en prisas. Y el plan no ha podido salir mejor… O quizá sí, si no llega a ser por ese final de ronda algo deslavazado (salvaba un gran bogey en el 18 tras irse fuera de límites con la primera bola).

Azahara ha dormido bastante bien todos los días, pero esta mañana notaba que las ‘piezas’ de su cuerpo no terminaban de ensamblarse. Un ‘virus’ extraño, inclasificable. Todo golfista lo sufre de tanto en tanto. El padre de Carlota, Jesús Ciganda, sin embargo, tiene su propia teoría acerca de lo que le ha pasado a la malagueña, y la verdad es que está muy bien tirada:  los efectos de un jet lag tan severo (doce horas de vuelo y doce horas de cambio horario) nunca sabes cuándo y cómo van a aparecer…

Sea como sea Azahara se rehacía sobre la marcha en el campo y jugaba unos segundos nueve hoyos fantásticos y cuajados de birdies. Una sacada de bunker sensacional en el 8 le cambió algo en la cabeza. Después, tras firmar la tarjeta, se marchaba directamente y sin comer al campo de prácticas. Una hora después salía de allí con una media sonrisa de alivio. El virus parecía vencido…

Las dos españolas, con sus más y sus menos, estarán luchando durante el fin de semana por la victoria. Dando la talla y cumpliendo las mejores expectativas. Una tiene que seguir atacando, Carlota, aunque sin prisas, tal y como establecía el plan del viernes. Otra, Azahara, ya está ahí arriba, como quien no quiere la cosa…