Luna Sobrón se ha quedado a las puertas del ANA Inspiration. La joven golfista española ha estado a punto de meterse en el primer major de la temporada por derecho propio tras un muy buen inicio de temporada en el LPGA Tour, pasando el corte en tres de los cuatro torneos que ha disputado. Concretamente, se quedó a dos golpes en el Kia Classic.
La golfista balear salió este domingo en la última ronda del torneo de Carlsbad con la idea entre ceja y ceja de rubricar una buena vuelta para darse una oportunidad. Empezó el torneo en el puesto 81º de la lista de ganancias del LPGA y necesitaba meterse entre las ochenta primeras para tener opciones de jugar el ANA. El objetivo estaba a tiro, pero había que sumar aún un puñado de dólares.
Luna Sobrón, en busca de la gran fórmula
Luna arrancó la vuelta con fuerza. Hizo bogey en el hoyo 2, pero su reacción fue extraordinaria. Encadenó tres birdies en los hoyos 3, 5 y 7 y se metió de lleno en la pelea por jugar el ANA. Es más, con ese resultado parcial que llevaba de dos bajo en el día lo habría conseguido. Sin embargo, en los segundos nueve hoyos cometió dos bogeys en los hoyos 13 y 15 por sendos tripateos. Obviamente, Luna no tenía en ese momento en la cabeza el resultado que le hacía falta, por lo que sólo pensaba en hacer birdies para lograr la ronda más baja posible. En ambas ocasiones fue demasiado agresiva en el putt de birdie y se dejó un compromiso de vuelta que no embocó. Una lástima.
Finalmente, ha terminado en el puesto 65º y se ha colocado la 83ª en el orden de mérito del LPGA. Es decir, se ha quedado a 1.554 dólares de jugar el primer grande del año y el tercero de su carrera, puesto que ya ha disputado en dos ocasiones el British (2015 y 2016).
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Hoy mismo tenía previsto volver a Palma de Mallorca para seguir trabajando. Evidentemente, el viaje de vuelta tiene un regusto amargo, ya que lo ha tenido muy cerca, pero el balance de su debut en el LPGA no puede ser más positivo. “Estamos contentos, lo está haciendo bien y lo más importante es que sabemos en lo que hay que trabajar para seguir mejorando y nos vamos a poner a ello. Luna es como una leona y ahora hay que controlarla para que sepa exactamente cuándo merece la pena atacar, a qué banderas hay que ir y dónde es mejor tirar a centro de green”, aseguraba a Tengolf su padre y entrenador, Marcos Sobrón.
