Azahara Muñoz siente que las piezas están volviendo a encajar. Hubo un tiempo, no hace mucho, que el puzle de su golf, y también el de su vida, andaba algo revuelto por culpa de la enfermedad de Hashimoto, una dolencia asociada a la tiroides que le provocaba cansancio y apatía y que tardó en ser detectada. La incertidumbre de no saber qué le pasaba le estaba afectando, pero una vez se diagnosticó el problema, el puzle está volviendo a su ser.
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Su gran inicio de temporada no es más que una muestra de ello. Se encuentra mejor fuera del campo de golf y eso se traslada a la pista de baile. Siente que va por el camino correcto y que los éxitos acabarán cayendo por su propio peso. ¿Volver a ganar? Siempre es un objetivo, pero piano a piano.
La última vuelta en el Kia Classic… “Todo el juego ha funcionado muy bien, he cogido muchas calles, he pegado golpes muy buenos a green y también he metido algunos putts fantásticos. Por ejemplo, el del hoyo 6, desde unos quince metros. Definitivamente, ése no me lo esperaba…”.
«Tengo un objetivo en lo que quiero trabajar y no me salgo de ese guión»
Una línea de trabajo clara y precisa… “Creo que la clave es que estoy trabajando en las cosas correctas. Tengo un objetivo en lo que quiero trabajar y no me salgo de ese guión. Hago las cosas más simples y obviamente también ayuda que me siento mucho mejor. Mi actitud también está mejor y las cosas han estado encajando. Todo suma”.
Los mejores golpes de la última ronda del Kia Classic
Sin salirse del plan… “Son objetivos que tengo con mi swing. Antes me movía más por sensaciones, según me estaba encontrando y ahora no, ahora me ajusto más un plan y me sienta como sienta y me levante como me levante trato de cumplirlo”.
El Blog de Azahara Muñoz
La enfermedad de Hashimoto… “Antes no me encontraba muy bien, sobre todo no tenía mucha energía. Evidentemente, es mucho más fácil entrenar y trabajar cuando tienes energía y te sientes mejor. Esa es la diferencia. Ahora estoy como se supone que debo estar, sé como combatir el problema y me encuentro mucho mejor”.
«El objetivo es ganar y me encantaría volver a levantar un trofeo, pero no estoy frustrada ni ansiosa, sé que estoy trabajando en la buena dirección»
Sin obsesiones por ganar… “Obviamente, el objetivo es ganar y me encantaría volver a levantar un trofeo, pero no estoy frustrada ni ansiosa, sé que estoy trabajando en la buena dirección. Cuantas más veces me ponga en esa situación, más opciones tendré y creo que en algún momento podría ocurrir”.
