El Número 1 del mundo, Dustin Johnson, vuelve a competir esta semana en el AT&T Pebble Beach Pro-Am después de su última aparición, hace dos semanas en Abu Dhabi, su incursión en el circuito europeo que cerró con un noveno puesto. En este tiempo, el de Carolina del Sur ha hecho dos cosas en lo que se refiere al golf. Primero anduvo practicando en Sherwood y saliendo a jugar un poco, no demasiado, lo normal; luego voló hasta Las Vegas para verse con su entrenador, el gurú Butch Harmon. “No trabajamos demasiado porque el swing está bien, sólo estuvimos pasando el rato…”, ha señalado al respecto el jugador con su particular laconismo.
Las celebrities, un año más, protagonistas en Pebble Beach
¿Realmente anduvieron sólo pasando el rato? Las sensaciones van y vienen y desde luego el juego de Johnson no estuvo en Abu Dhabi a la altura del poderío arrebatador de Hawai (salvo en la segunda jornada, en la que firmaba un 64) aunque el estadounidense asegura que su nivel de confianza está por las nubes. Aparentemente, no le preocupa mucho la posibilidad de perder el cetro del golf mundial, el número 1, algo que ya pudo suceder en semanas anteriores. Su razonamiento al respecto no puede ser más simple y, por otro lado, rezuma confianza: “si juego bien, seguiré como Número 1. Si no es así, hay muchos jugadores que están muy bien y que podrían serlo. Será duro para mí mantenerme, pero si juego bien estaré en el número 1 al final del año”.
Jon y Rafa ya tienen horarios de salida en Pebble Beach
El torneo tiene enjundia, pues se encuentran los tres primeros del ranking mundial, Dustin Johnson, Jon Rahm y Jordan Spieth, defensor del título. Además, se une a la partida Rory McIlroy, que ha regresado muy fuerte a la competición, aunque aún no ha saciado el hambre de victorias.
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El torneo, con formato Pro-Am, se disputa como es bien sabido en tres campos, Pebble Beach, Monterey y Spyglass, jugándose la definitiva ronda dominical en el primero de ellos. En aquel punto de la costa californiana se encuentran también Rafa Cabrera Bello y Paul Casey, que podrían dar un paso adelante en la clasificación Ryder con una buena semana.
