Rory McIlroy (-13) ha firmado la mejor tarjeta del día en el RBC Canadian Open para meterse de lleno en la pelea por la victoria en el torneo. El norirlandés, con seis birdies y una ronda libre de bogeys, ha cerrado el sábado con 64 golpes, seis bajo par, para escalar 12 posiciones en la clasificación y alcanzar el coliderato junto a Webb Simpson (-13) y Matt Kuchar (-13).
Su primer golpe del día, un tremendo drive de casi 340 metros, fue un aviso de lo que el número 4 del mundo tenía pensado para la jornada del movimiento en el Hamilton Golf & Country Club. Tirando de driver siempre que era posible, con un altísimo porcentaje de calles ‘cazadas’ y sellando más de 77% de greenes en regulación, McIlroy ha recuperado su mejor versión a apenas cinco días del US Open de Pebble Beach.
Además, ha estado especialmente fino con el putter, con más de 1,8 golpes ganados de media. Así, Rory se ha colado con todo merecimiento en el partido estrella de mañana, junto a Webb Simpson. El de Carolina del Norte arrancó el día como quinto clasificado y acabó en lo más alto de la tabla gracias a una ronda de 67 golpes, con tres birdies y también libre de errores.
Kuchar y Sergio, en Canadá, las dos caras eternas del golf
Uno de los grandes ‘perjudicados’ de la doble remontada fue Kuchar, que comenzaba el sábado liderando el torneo canadiense del PGA Tour junto a Scott Brown (-7) (el otro damnificado del sábado) y apenas ha podido ganarle un golpe más al campo con dos dolorosos bogeys en el 3 y el 15. Además, al llegar el último a la Casa Club, se queda fuera del partido estrella del domingo.
Shane Lowry (-12) le acompañará el domingo tras completar una excelente ronda de 66 golpes. Ambos, junto a Adam Hadwin (-12), que cuenta con el apoyo del público, Brandt Snedeker (-12), que dejó algunos putts ‘kilométricos’ para el recuerdo, e incluso Henrik Stenson (-10), al que no conviene dejar fuera antes de tiempo, pelearán por apurar su opciones en un torneo para el que ya no cuentan ni el número 1 del mundo, Brooks Koepka (-2), ni, salvo milagro, el número 2, Dustin Johnson (-6).
