Gonzalo Fernández Castaño (-3) ha conseguido salvar in extremis la primera gran criba de la semana en el Wyndham Championship. Hoy tenía que remar para pasar el corte y vaya si lo ha hecho. Ha entregado una tarjeta de 68 golpes y se ha metido en el fin de semana justo con el resultado que hacía falta. Eso sí, pasar el corte raspado le deja aún muy lejos del objetivo.
Gonzalo, al menos, se ha dejado la puerta abierta a la machada, a un fin de semana épico, que es exactamente lo que necesitará para acabar primero o segundo, los dos únicos resultados que le valen para meterse en los playoffs de la FedEx Cup y mantener la tarjeta sin necesidad de repesca.
Gonzalo arrancó hoy con bogey, pero rápidamente enderezó la vuelta con un birdie y un eagle estratosférico. El madrileño pegó el golpe del día en el hoyo 5 y se dejó el eagle dado. Brutal. Hizo un birdie más en el hoyo 8, nuevamente tras casi embocar en el tiro desde la calle. Una vez más ha estado fino con los hierros y hoy, al menos, ha metido un par de putt de más de tres metros, el de birdie en el 4 y uno muy bueno de bogey en el 2.
El golfista español no ha podido mantener el ritmo en los segundos nueve. Su parcial aquí ha sido de ocho pares y un bogey y ha tenido casi que pedir la hora para pasar el corte. Ha apretado los dientes y ha encadenado cinco pares consecutivos para meterse en el fin de semana. El resultado de -3 ha entrado por los pelos.
Así las cosas, superada la primera criba, ahora sólo le queda soñar en grande. Por ejemplo, Gonzalo se pide para este sábado un 61, como el que hizo ayer Matt Every o como el que hoy ha hecho Ryan Armour. Es lo que necesita para meterse de verdad en la pelea por poder ganar el torneo. También es cierto que no debe despistarse, ya que mañana se producirá un nuevo corte con los 70 mejores y empatados ya que han pasado la primera criba más de 78 jugadores.
Más allá de la situación de Gonzalo, los líderes del torneo son Ryan Armour y Webb Simpson con -13.
