La marca de palos que iba a jugar Rory McIlroy se convirtió casi en una cuestión de estado después de que Nike Golf anunciara a finales del año pasado que dejaba la producción de material duro. ¿Con quién iba a firmar Rory? ¿Cuál sería su decisión final?
Es la pregunta que se hacía el mundo del golf y Rory se hizo de rogar. De hecho, estuvo varios meses con completa libertad probando diferentes marcas. Por ejemplo, comenzó la temporada pegando Callaway. Tanto es así que el propio Rory llegó a decir que estaría un año entero sin firmar con nadie. Sin embargo, la película ha cambiado. McIlroy ha deshojado la margarita. Esta misma semana, en plena vorágine del THE PLAYERS, se ha sabido que jugará con Taylormade.
“He estado en el campo de golf lo suficiente y he visto todo», dijo McIlroy esta semana durante una entrevista con pgatour.com y «nunca he estado tan entusiasmado con el equipo como ahora, lo que creo que es mucho decir».
Como parte del nuevo acuerdo, el jugador de 28 años utilizará catorce palos de TaylorMade, la pelota y llevará la bolsa de la compañía.
Con McIlroy en el equipo, TaylorMade puede presumir de tener a los tres primeros jugadores del mundo y a cinco de los diez primeros. No obstante, lo que hace que la firma sea aún más intrigante es la razón por la que McIlroy decidió firmar con TaylorMade en primer lugar. Aunque la compañía es conocida principalmente por su tecnología de driver, la razón principal por la que que McIlroy ha firmado con ellos ha sido la nueva bola de golf: TP5x de TaylorMade.
McIlroy cerró la temporada pasada ganando el Tour Championship y la FedEX Cup jugando toda la temporada con la bola Nike RZN Tour Platinum. Sin embargo, tras las vacaciones, Rory comenzó a probar nuevas combinaciones de palo y pelota y tomó la decisión de reincorporar Pro V1x de Titleist y jugar con Callaway en el Open de Sudáfrica del European Tour.
«Utilicé Titleist porque la conocía y estaba familiarizado con ella», dijo McIlroy. Después, trató de ajustar el equipo a la bola. Así, en altitud, en WGC México Championship funcionó muy bien, peleó por la victoria y acabó en el top ten. Todo cambió cuando fue a jugar al nivel del mal. McIlroy empezó a sentir que algo no funcionaba.
«Empecé a notar cuando volví al nivel del mar en Bay Hill, especialmente con viento, que no sentía cómo y dónde iba a terminar la bola».
Con la bola TP5x actuando como el catalizador, McIlroy fue trabajando con los palos de Taylormade. Primero añadió el driver TaylorMade 2017 M2 y también las maderas de calle M2. Eso ya lo hizo en el Masters. En este momento, McIlroy dijo que mandaba su drive de 315 a 320 yardas.
«Simplemente me gusta la forma tradicional de la cabeza y lo fácil que es cuadrar la pelota en la línea», explicó McIlroy. «La cara negra y la corona blanca realmente me ayudan con la alineación, que me gusta especialmente. Es fácil de pegar. En realidad, pegaba con más velocidad de bola el M1, pero la forma del M2 me acabó de convencer». Lo último en añadir han sido los hierros y ya es jugador total de Taylormade.
