Rafa Cabrera Bello (-1) ha cerrado el The Northern Trust Open con una vuelta de 68 golpes, tres bajo par, y ha remontado algo más de diez puestos en la clasificación. En el momento de acabar su vuelta era uno de los mejores resultados del día y había conseguido ganar a su pareja de baile, Andrew Putnam, por nada menos que siete golpes.
No obstante, más allá de la clasificación final en este primer playoff de la FedEx Cup o de otros datos, lo más importante es que hoy también le ha mandado un buen mensaje a Thomas Bjorn. El jugador canario le ha dicho al capitán de la Ryder Cup que lo de ayer sólo fue un mal día, un accidente. Entre una vuelta y otra la diferencia ha sido nada menos que de nueve golpes. La reacción ha sido espléndida y, sobre todo, ha recuperado las mejores sensaciones con el putter. Ha metido mucho entre dos y cinco metros, una distancia crucial en cualquier torneo y, por supuesto, también en la Ryder Cup. Concretamente, han sido cinco de birdie y uno de par.
A Rahm no le salió bien el primer test (y quizá sea el último)
Desde luego, tras el Northern Trust el combate entre Ian Poulter, Paul Casey y el propio Rafa Cabrera Bello por una invitación del capitán para la Ryder Cup se puede declarar nulo puesto que apenas ha habido diferencias entre los tres. Sí hay algunos que lo han hecho peor, ya que se quedaron fuera del corte, casi de Alex Noren o Russell Knox. De hecho, el escocés casi se puede dar por descartado, mientras que Noren sigue dentro del equipo.
Tampoco Thomas Pieters o Eddie Pepperell, al otro lado del charco, en el Czech Masters, han rubricado actuaciones que puedan epatar a Bjorn. Han acabado dentro del top ten, pero muy lejos de la pelea por la victoria.
Ahora toca esperar para saber si Rafa decide jugar el segundo playoff de la FedEx Cup la próxima semana o si en cambio se cruza el Atlántico para disputar el Made in Denmark. De momento, no está inscrito en el torneo, pero aún quedan dos invitaciones por adjudicar.
Rafa descarrila en un día para olvidar y Tiger coge aire
Cabrera no ha conseguido meterse esta semana en el equipo de la Ryder Cup, ya que para ello sólo le valía la victoria, pero tampoco ha dado un paso atrás para ser elegido por Thomas Bjorn. Su nombre debe seguir subrayado en la agenda del capitán, aunque todavía resta por ver lo que pasa la próxima semana. Rafa puede apostar perfectamente por quedarse en Estados Unidos y tratar de deslumbrar a Bjorn con una gran actuación frente a la plana mayor del equipo rival. Ya no tendría opciones de clasificarse directamente para el equipo, pero sí se garantizaría, si es que no la tiene ya, una invitación para estar en París en octubre.
