Adam Scott, una de las voces autorizadas del PGA Tour, ha sido especialmente crítico con los controvertidos cambios en las reglas del golf, que entraron en vigor el pasado uno de enero, llegando a asegurar que su deporte se está «convirtiendo en el hazmerreír».
El australiano, en una charla con Karen Crouse, del New York Times, no se mordió la lengua a la hora de dar su opinión: «Han introducido más áreas grises en el juego de las que eran necesarias». Pero esto fue sólo el principio…
Cuestionado por la regla que permite patear con la bandera puesta, dijo: «Para ser honestos, es momento es prácticamente la clave del juego. Ahora es darle a la bandera, no embocar el putt. Se supone que era algo para hacerte pensar y obligarte a leer los greenes…».
Quizá no sea supervivencia, pero Riviera va a estar duro de pelar…
Para Scott, el principal problema es que se ha creado más confusión, cuando el objetivo inicial era lograr que el juego fuera más sencillo para todos y se pudiera agilizar: «No hemos tenido muchos cambios de reglas en la historia del golf, y ahora, de repente, en los últimos tiempos, ha habido un montón, incluso normas que cambian de una semana a otra, es una locura».
Dropar dejando caer la bola desde la altura de las rodillas o la polémica norma sobre la posición de los caddies cuando los jugadores se disponen a golpear la bola, que ha provocado ya algunas sanciones, son otros de los cambios más llamativos.
Para terminar, Scott zanjó su intervención con una frase lapidaria que a buen seguro será muy comentada este jueves en el Riviera Country Club, donde disputa el Genesis Open: «Creo que nos estamos convirtiendo en el hazmerreír». Para el australiano, toda la polémica, controversia o confusión semanal que está viviendo el mundo del golf genera una mala imagen.
Las nuevas reglas que debe conocer si juega al golf a partir del 1 de enero
