A pesar de unos últimos nueve hoyos más bien mediocres, a Tiger Woods (–13) le sobró para hacerse con su 57 victoria en el Tour de la PGA. Y no es porque no hubiera competencia: Steve Stricker, que acabó segundo, anduvo cerca e incluso lideró por momentos…
Pero se quedó en –11; Phil Mickelson venía fuerte desde atrás, pero su –9 final sólo le sirvió para ser tercero, empatado con Rory Sabbatini, que hizo dos sobre el par del campo en la última jornada. Y Vijay Singh, que participó en la lucha hasta el final, se fue dos veces seguidas al arroyo del 18 (triple bogey) y firmó un 74 que le relegó a la séptima posición. Alguno puede pensar que esas cosas también le pueden pasar a Woods, pero su capacidad para cumplir cuando hace falta supera a la de los demás …Esta victoria tiene para Tiger Woods doble premio. Por un lado le arrebata a Vijay Singh la primera posición de la clasificación de la FedEx Cup, que ahora queda con Woods a la cabeza, el fijiano Singh en segundo lugar, Charles Howell III tercero y Phil Mickelson cuarto. Por otro lado, la victoria en el Wachovia afianza, más si cabe, la confianza de Woods en su juego de cara al The Players Championship que se celebra la semana que viene.
Sergio García (–4) y José María Olazábal (–3) firmaron sendos pares que les han permitido finalizar en los puestos décimo cuarto y décimo sexto, respectivamente. Esperemos que lo de Fernández-Castaño sea contagioso y se propague a este lado del Atlántico.
