Rory McIlroy asegura que el hoyo 12 fue clave en su victoria en el THE PLAYERS Championship. Y no, no lo dice porque pegara un golpe especial, encontrara algo en su swing o por el putt tan importante de birdie que embocó. Tiene mucho más que ver con las sensaciones. Realmente, en ese hoyo se dio cuenta de cómo estaba el torneo y qué hacía falta para ganar.
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Ese instante crucial comenzó con un rugido. Rory iba camino del green del 12 y escuchó una explosión de alegría. No sabía de dónde venía, pero tenía claro que debía ser en el 17. Allí es donde se concentra más público y las emociones están a flor de piel. Extrañado, decidió preguntar a ‘Bones’, el que fuera caddie eterno de Phil Mickelson y que ahora realiza labores de comentarista de televisión a pie de campo.
“¿Qué ha pasado? ¿Hoyo en uno en el 17?”, inquirió McIlroy. “No, ha sido un putt de Eddie Pepperell de 15 metros para birdie”, le respondió. Rory sonrió, se alegró de manera sincera por Pepperell y no le dio mayor importancia. Sin embargo, al llegar a green había una pantalla con los resultados y descubrió que Pepperell se había puesto con -14. “No me lo podía creer. Fue como, pero Eddie, de dónde ha salido para ponerse ahí arriba…”, explicó después de levantar el trofeo.
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Precisamente, ahí se dio cuenta de que necesitaba un cambio de marcha en su vuelta si quería ganar el torneo. Había que hacer birdies. Lo hizo en el 12, 15 y 16 y se llevó el gato al agua. El punto de inflexión fue aquel rugido.
Obviamente, después de ganar, todas las preguntas a Rory estaban dirigidas al Masters de Augusta. McIlroy puede convertirse en el séptimo jugador de la historia que logra el Grand Slam. Sólo le falta Augusta en su palmarés. “Estoy muy contento porque creo que el Stadium Course y Augusta son campos parecidos y me encuentro jugando el mejor golf de mi vida. El objetivo ahora es mantener este nivel hasta dentro de dos semanas”, asegura.
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La victoria también ayuda a ganar confianza, aunque Rory asegura que no era vital. “Sé que estoy jugando muy bien y que puedo ganar en cualquier momento. Ya lo sabía antes de ganar esta semana y no me hacía falta el triunfo antes de Augusta. Obviamente, siempre viene bien ganar, pero no era fundamental”, señala.
Otro de los favoritos en Augusta será Dustin Johnson. El Número 1 del mundo ha cerrado el mejor THE PLAYERS de su carrera, su primer top ten. De hecho, es el primer jugador desde 1997 (Steve Elkington) que rubrica cuatro rondas por debajo de 70 golpes en Sawgrass. No hay ninguna duda de que va a llegar en un estado óptimo al Masters.
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Más dudas hay con Tiger Woods, aunque su juego largo sigue dejando señales positivas. El californiano cazó este domingo 12 de las 14 calles de Sawgrass, una cifra que invita al optimismo. No lo hacía en este campo desde la última ronda de 2005.
