Jon Rahm llega al WGC México Championship con hambre, y no sólo porque lleve dos semanas sin competir, un merecido descanso después de un inicio de año bastante cargado, sino por una curiosa e interesante estadística que defiende desde que ganó su primer torneo como profesional.
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Tras la victoria en el Farmers Insurance Open de 2017, es decir, hace algo más de un año, Rahm no ha estado más de tres semanas consecutivas sin acabar un torneo en el top ten. Ahora llega al Club de Golf Chapultepec de México precisamente después de tres torneos consecutivos sin hacer top ten: Farmers Insurance Open (29º), Waste Management Phoenix Open (11º) y AT&T Pebble Beach Pro Am (26º). Es decir, a Jon ya le suenan las tripas… Según esta secuencia, deberíamos esperar otra gran actuación esta semana.
Desde que ganó el Farmers Insurance Open en 2017, Rahm nunca ha encadenado más de tres semanas sin hacer top ten
El ejemplo más reciente de cómo reacciona tras tres semanas seguidas sin top ten es demoledor a favor del jugador de Barrika. Encadenó el Italian Open (15º), el Andalucía Valderrama Masters (corte) y el WGC HSBC Champions (36º), y a la cuarta semana ganó el DP World Tour Championship, la gran final del European Tour.
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La vez anterior que ocurrió algo similar fue justo antes de la FedEx Cup. Llegó al primer torneo de los Playoffs del PGA Tour después de haber enlazado el British Open (44º), el WGC Bridgestone (28º) y el PGA Championship (58º). Su respuesta inmediata fue un tercer puesto en el Northern Trust Open.
La estadística, como ven, es brutal. Es una muestra paladina de la solidez de Jon y su capacidad para rebotar de forma positiva. Desde que se hizo profesional, junio de 2016, su racha más larga sin hacer al menos un top ten fue de siete torneos, ya que encadenó los tres últimos del PGA Tour del año 2016 con los cuatro primeros de la siguiente temporada. Después de aquella ‘mala racha’ (lo ponemos entre comillas porque estaba debutando como profesional y en esos siete torneos hizo cuatro top 25 y sólo falló un corte), ganó el Farmers Insurance Open.
Evidentemente, aquí no hay ninguna pócima mágica. Se trata únicamente de una curiosa estadística que sí refleja al menos la enorme capacidad que tiene el joven talento español de hacer buenos resultados y lo rápido que despeja su cabeza cuando las cosas no salen tan bien como él esperaba. Así que ya saben, los números –y lo que no son números- indican que sólo podemos esperar lo mejor de Jon esta semana.
