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Un pequeño tratado masoquista acerca del putter

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Jordan Spieth. © Golffile | Ken Murray
Jordan Spieth. © Golffile | Ken Murray

Al final, todos los caminos llevan a Roma, lo que traducido en el argot del golf bien pudiera ser que todos los caminos llevan al green y al putter. Por supuesto que esta semana, en Bethpage Black, el rendimiento desde el tee era primordial. No sólo había que ir a calle, sino además largo, a ser posible. Es muy cierto. Pero de nada sirve si luego está uno cegado en los greenes. Jordan Spieth nos dejaba un dato revelador al respecto, que a lo mejor conviene comparar con los muchachos de la Armada, por aquello de sacar a pasear la vena masoquista.

El texano había embocado a lo largo y ancho de los primeros 36 hoyos algunos putts excelentes de media y larga distancia, pero queríamos fijarnos en otro dato: Spieth tiró en las dos primeras rondas 27 putts de ocho pies o menos (de 2,43 metros hacia abajo) y los embocó todos. Aquí se incluyen, por supuesto, los llamados putts dados, en torno al medio metro o menos de distancia. Pero ahí está el pleno, 27 de 27.

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Y la diferencia en este sentido puede ser decisiva. Puede cambiar un escenario de la noche al día. Hagamos la prueba. En esas dos primeras rondas Sergio García tiró 42 putts de 8 pies hacia abajo y embocó 33… De haber hecho el pleno, igual que Spieth, no sólo habría pasado el corte, sino que habría salido en los últimos partidos del sábado, con un acumulado de -4. Lógicamente, los números no lo dicen todo, puesto que no indican cómo era cada putt, y no es lo mismo, por ejemplo, patear desde dos metros cuesta arriba que cuesta abajo, o un putt más o menos recto que otro con mucha caída. Pero sirve como referencia aproximativa muy jugosa.

En todo caso, para separar el polvo de la paja, digamos que entre los 27 putts contabilizados de Spieth había ocho de entre cinco y ocho pies (obviamente los metió todos), por siete entre los 42 de Sergio, que falló seis de estos siete.

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El caso de Jon Rahm no es tan señalado, pero también tiene su miga. El joven vasco tiró 36 putts de ocho pies hacia abajo y embocó 31. Ni que decir tiene que el pleno le habría asegurado el corte de sobra, pues se habría quedado con un acumulado de PAR, incluso dentro de la pelea, Koepka aparte.

Hoy, sábado, tercera ronda, Spieth ha tirado 19 putts de 8 pies o menos distancia. Y ha fallado dos. No ha estado muy fino en general, aunque se ha defendido notablemente en un Bethpage largo y duro, pero de haber mantenido el pleno, habría conservado la segunda posición y desde luego no habría perdido seis puestos en la clasificación.

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