Inicio The Open Championship The Open Championship 2018 La ‘vendetta’ pendiente de Francesco Molinari

La ‘vendetta’ pendiente de Francesco Molinari

Compartir
Francesco Molinari esta semana en Carnoustie Golf Links. © Golffile | Eoin Clarke
Francesco Molinari esta semana en Carnoustie Golf Links. © Golffile | Eoin Clarke

Francesco Molinari (-6) está disputando por undécima vez el British Open y, por si todavía no hubiese quedado suficientemente demostrada su solidez y consistencia, añadamos un dato: las diez últimas han sido de modo consecutivo, desde 2009 en Turnberry hasta esta semana en Carnoustie. En 2018, no obstante, el italiano ha dado un salto de calidad evidente. Ganó en Wentworth y también en suelo americano por primera vez.

Además, yendo más al dato concreto y rabiosamente actual, hoy mismo acaba de firmar la que ha sido con diferencia la mejor tarjeta de su vida en un Open Championship (65 golpes), siendo la sexta vez que bajaba de 70 golpes en este torneo. De hecho, con este registro se ha postulado como candidato al triunfo en la jornada definitiva, que por cierto se espera bastante revuelta en los que a meteorología se refiere.

Con 35 años cumplidos, la trayectoria de Francesco es impoluta: cinco victorias en el European Tour, una de ellas en un WGC, el HSBC, otra más en el PGA Tour hace unas semanas (Quicken Loans)… Sin embargo, de un tiempo a esta parte (en dos años cifra el jugador el proceso) su evolución dio una vuelta más de tuerca: había que ser un poco más agresivo, más ambicioso. El jugador italiano se lo ha explicado hoy al detalle a Tengolf (VER VÍDEO): ayudado por un equipo excelente de trabajo ha ido cambiando su mentalidad.

Lo que nos lleva a la otra gran cuestión. El menor de los Molinari tiene una espina clavada desde hace tiempo que su nueva y reforzada versión como jugador quiere sacarse: la Ryder Cup. Ha jugado dos ediciones, empatando aquel último partido ante Tiger en Medinah (2012), pero aún no ha ganado ningún duelo en esta competición. Francesco no puede ser más humilde y transparente cuando se refiere a esta cuestión: “la primera Ryder nunca es fácil para nadie y en la segunda me faltó algo de personalidad; creo que ahora soy más completo y podría ayudar más al equipo si me meto”, señala. Esta es la particular ‘vendetta’ deportiva que tiene entre ceja y ceja y bienvenida sea, puesto que este año hará falta hasta la última llama de pasión.

Siga aquí los resultados en directo