El día ha amanecido espléndido en Royal Portrush después de una noche con mucha lluvia. Luce el sol y así será durante toda la jornada con algún intervalo nuboso. Hay amenaza de lluvia, pero es bastante pequeña, apenas del diez por ciento. Eso sí, en cuanto al viento da la sensación por la previsión que se alía con los últimos partidos.
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Según el parte meteorológico ofrecido por el Open Championship esta misma mañana, hasta las doce del mediodía, hora local, se esperan vientos constantes de entre 25 y 30 kilómetros, con rachas que podrían alcanzar los 40 en determinados momentos.
Más o menos se mantiene esta intensidad hasta la seis de la tarde y se espera que caiga mucho en las dos últimas horas de juego, es decir, entre las seis y las ocho, justo cuando los últimos partidos del día estén jugando los nueve últimos hoyos del campo. Se calcula un viento que apenas llegará a los 15 kilómetros.
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Así las cosas, parecen condiciones favorables para los últimos partidos. Buenas noticias para los líderes.
Otra cosa será el domingo. La predicción ahora mismo anuncia tiempo de perros para las últimas horas de juego, con probabilidad alta de lluvias fuertes y vientos que podrían superar los 55 kilómetros por hora a partir de las seis de la tarde. Es decir, podemos vivir un final de Open dramático.
