Shanshan Feng es una poderosa golfista de 27 años. Es la mejor jugadora de China y se convirtió en una referencia del deporte de su país cuando conquistó la medalla de bronce en los pasados Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.
Ya había ganado un major en 2012 (Women’s LPGA Championship) y tiene veinte victorias repartidas por todo el mundo, pero “no hay nada como unos Juegos Olímpicos para China”. Hasta aquí, más o menos, lo más conocido del curriculum de la actual líder del US Open. Sin embargo, hay una faceta menos conocida de Feng entre el gran público y es su enorme sentido del humor. Shanshan se ríe hasta de su sombra.
Un buen ejemplo se vivió ayer cuando explicó su tercera ronda. “Empecé jugando bien, pegando buenos tiros, pero no metía ningún putt. No sé por qué no veía bien las caídas y, sobre todo, no me hacía a la velocidad de los greenes, así que pasé al plan B”. ¿Y cuál es ese? “Dejarlas aún más cerca del hoyo. Es lo que hice en los tres últimos. Pegué muy buenos tiros en el 16 y 17. Tenía putts de birdie de unos dos metros, pero no entraron. En el 18 me dije, la tienes que dejar aún más cerca. La puse a un metro y la metí”. Así de simple y fácil lo explica la golfista de china.
“Por curiosidad, ¿tienes plan C?”, le preguntaron los periodistas. “Claro, si lo anterior no funciona, tiro a meter desde la calle”, señaló con una sonrisa de oreja a oreja a oreja.
Es más famosa también su anécdota durante la recepción del presidente de China a los medallistas olímpicos. Ayer la recordó. “Estábamos colocados todos en fila y yo estaba como la décima cuando entró el presidente. Fue saludando uno a uno a todos los medallistas. Más o menos estaba dos segundos con cada uno. Cuando llegó a mi altura, alargué mi mano, nos las estrechamos y le dije: “es usted muy guapo”. Se quedó muy sorprendido, hasta dio dos pasos hacia atrás, pero luego regresó y me dio de nuevo la mano, así que conmigo estuvo cuatro segundos”, comentaba entre carcajadas. “No sé muy bien por qué le dije eso, fue lo primero que me salió de la cabeza”, explicó la risueña golfista asiática.
Por si aún le quedan dudas de su enorme sentido del humor, no se la pierdan hoy cuando pinche la bola en el tee del hoyo 1 para afrontar la última ronda del US Open. Le preguntaron qué le diría a Donald Trump si lo tuviera delante y Feng regateó la pregunta diciendo “igual preferís que hablemos de lo que voy a llevar puesto… Me voy a poner mis pantalones cortos estilo vaca porque sé que le gustan mucho a la gente”. Y más risas…
Feng es una jugadora que también sabe reírse de sí misma, y no sólo por la ropa que pueda llevar puesta en una ronda de golf. Se toma la vida con buen humor y así lo transmite. Esta misma semana, cuando le preguntaban qué era lo que más le gustaba de Estados Unidos, respondió otra vez entre risas: «creo que salta la vista: la comida».
Así es Shanshan Feng, una golfista que puede hacer historia en su país al ganar nada más y nada menos que el Open de Estados Unidos.
