Max Homa, Nathan Smith, Michael Kim, Matthew Fitzpatrick o Kevin Phelan, a cualquiera de ellos podríamos verlo ver a corto y medio plazo levantando un trofeo del Circuito Europeo o PGA Tour, o quién sabe si un major.
Ellos son cinco de los veinte jugadores que han disputado este fin de semana la Walker Cup, la gran cantera de grandes campeones anglosajones, la competición que cada dos años enfrenta a los mejores amateurs de Estados Unidos contra los mejores de Gran Bretaña e Irlanda. Nombres que conviene anotar en la agenda, algunos no llegarán, otros harán poco ruido, pero seguro que entre todos ellos salen varios top ten mundiales.
Estados Unidos ganó la Walker Cup disputada en el histórico National Golf Links of America en Nueva York. Más que ganar, arrasó a su rival con un contundente 17-9, el resultado más abultado de los últimos 20 años. Confirma su supremacía histórica desde que la competición comenzara allá por 1922: 35 victorias USA, 8 GB e Irlanda y 1 empate. Eso sí, la confrontación se ha igualado muchísimo en los últimos años. De hecho, se reparten a partes iguales las victorias en las diez últimas ediciones.
Más allá del resultado, que quedará para siempre en la historia del torneo, lo más interesante es apuntar los nombres de los participantes e imaginar qué podrán hacer en el futuro, sobre todo los más jóvenes.
Por Estados Unidos han jugado Max Homa (22 años), Michael Kim (20), Jordan Niebrugge (20), Patrick Rodgers (21), Nathan Smith (35), Justin Thomas (20), Michael Weaver (22), Todd White (45), Cory Whitsett (21) y Bobby Wyatt (21). Evidentemente, aquí habría que dejar al margen de nuestra imaginación a Nathan Smith y Todd White, dos fabulosos jugadores, ya veteranos, que han decidido realizar su carrera golfística en el terreno amateur.
Por Gran Bretaña e Irlanda todos son jóvenes valores: Matthew Fitzpatrick (18, Inglaterra), Nathan Kimsey (20, Inglaterra), Gavin Moynihan (18, Irlanda), Max Orrin (19, Inglaterra), Kevin Phelan (22, Irlanda), Garrick Porteous (23, Inglaterra), Rhys Pugh (19, Gales), Neil Raymond (27, Inglaterra), Callum Shinkwin (20, Inglaterra) y Jordan Smith (20, Inglaterra). Incluso el más veterano, Raymond, ha anunciado que se pasará a profesional tras la Walker Cup.
De estos 18 grandes talentos de futuro hay que destacar al inglés Matt Fitzpatrick, por su descarada juventud y porque su año ha sido fabuloso. Es imposible saber ahora mismo cuál puede ser su techo. Ganó la Silver Medal al mejor amater en el British Open de Muirfield (44º), ganó el British Boys y se convirtió en el primer inglés desde 1911 en ganar el US Amateur. Más de un siglo después. Palabras mayores. Su Walker Cup ha sido, además, casi impecable. Dentro del batacazo europeo, Fitzpatrick ha ganado tres de los cuatro puntos que ha disputado.
También hay que destacar a Michael Kim, Número 2 del ránking mundial amateur, por detrás de Fitzpatrick, y que ha ganado los tres puntos que ha jugado en esta Walker Cup. Sorprendentemente se quedó en el banquillo en los primeros foursome. Fue el mejor amateur en el US Open de Merion (17º).
Y el resto de top ten mundiales amateurs presentes en esta Walker Cup son Cory Whitsett (3º), Patrick Rodgers (3º) y Max Orrin (7º). Apunten todos estos nombres porque darán que hablar en el futuro.
Por cierto, el español Scott Fernández, miembro de la Palmer Cup, competición que enfrenta a Estados Unidos y Europa, es decimosexto en el ránking mundial, por delante de once jugadores que han estado presentes en esta Walker Cup.
