Hace menos de un mes Pablo Martín estaba encerrado en un hotel de Hong Kong con la calculadora en la mano y sudores fríos por todo el cuerpo…
Se estaba jugando la tarjeta del circuito Europeo. Cada golpe era un drama. Una simple cuestión de pocos euros. Hoy Pablo ya puede quitarle las pilas a la calculadora y esconderla en un cajón, o quemarla, da lo mismo. No la va a necesitar por mucho tiempo.
Pablo tenía que reventar y lo ha hecho en Sudáfrica.
El malagueño ha ganado el Alfred Dunhill Championship, en Sudáfrica, en el recorrido de Leopard creek, rodeado de una buena parte de las mejor fauna sudafricana, la animal y la golfística. Y es que Charl Schwartzel no se lo ha puesto nada fácil.
El español salía a jugar la última ronda con dos golpes de ventaja. Necesitaba una buena vuelta para ganar y la ha hecho. 69 magníficos golpes sustentados en un driver explosivo y descomunal y un putter muy fino, finísimo. Ha vencido con un golpe de ventaja sobre Schwartzel, su gran rival, ya que el resto de perseguidores se ha ido cayendo con el paso de los hoyos.
Pablo Martín consigue su segunda victoria en el circuito Europeo. Seguirá siendo recordado como el primer amateur de la historia que venció en Europa, pero ahora ya tiene dos estrellas en la solapa. Lo cierto es que se ha impuesto como un ganador consolidado. Ha jugado muy tranquilo durante todo el día, formando un tándem perfecto con su caddie, relajado, hablando, apretando el paso cuando hacía falta y dedicando tiempo a cada golpe.
La estrategia ha sido perfecta. Cada tiro iba a la zona que hacía falta. Sólo ha fallado un golpe, en el hoyo 7, cuando se ha ido al agua. Aún así, ha sacado un grandísimo bogey.
Quitando ese golpe, sus primeros nueve hoyos han sido de libro. El driver le ha allanado el camino muchas veces. En los hoyos 8 y 9, dos de los cocos de Leopard Creek, ha pegado dos salidones y se ha dejado sendas opciones de birdie que se han escapado por poco.
Su empleo del driver ha sido de tal calibre que en muchas ocasiones ha pisado la salida a Charl Schwartzel, uno de los pegadores más largos del mundo. Pablo ha conseguido una velocidad de palo tremenda, un desgire del cuerpo vertiginoso y la bola ha salido siempre recta. No se ha metido en ningún problema serio, algo muy poco habitual en este campo. Mientras, su rival sudafricano, jaleado por su público, sí lo pasaba peor desde el tee. Ha tenido que dropar en el 11 y en el 13, por ejemplo.
Pablo ha tenido un control de la vuelta sensacional y en buena medida se ha debido al putter. Ha estado soberbio en el green. Nunca ha hecho más de dos putts y ha metido todos los comprometidos de dos metros hacia abajo, algunos muy importantes para par. Empezaba con birdie en el hoyo 2, tras una buena opportunidad de eagle. Hacía otro en el 5 después de un tirazo desde el tee y tras dejarse en el camino dos buenas oportunidades en el 3 y el 4. En el 6 salvó su primera situación difícil con el putter.
El torneo parecía visto para sentencia en el hoyo 13. Pablo hacía su segundo birdie consecutivo y obtenía cuatro golpes de ventaja sobre Schwartzel, pero el sudafricano se ha empeñado en darle emoción. Ha hecho tres birdies seguidos y se ha puesto a un golpe y dos hoyos por jugar.
Martín, mientras, no se ponía nervioso. Seguía haciendo pares, sin arriesgar más de lo debido, dándole toda la responsabilidad de ataque a Schwartzel.
En el hoyo 16 nos encogimos todos. Cogió el hierro 6 desde el tee y pasó el agua por muy poco. Botó en green y se dejó una opción de birdie. Ése fue su último golpe de infarto.
El andaluz jugó los dos últimos hoyos de libro. En el 17 se aclaraba el panorama. Schwartzel hacía bogey tras fallar otra vez la salida y Pablo sacaba el par con mucha paz. Le valía el par en el 18 y lo hizo nuevamente de forma muy inteligente. Pegó un salidón y pegó dos wegdes consecutivos para quitarse de líos con el agua. Después dos putts, el último de medio metro, y victoria.
España empieza la temporada 2010 con una victoria. Mejor, imposible, en un año en el que recuerden hay Ryder Cup.
En cuanto al resto de españoles, Nacho Garrido ha completado un gran fin de semana y ha terminado en la undécima posición con -10. El madrileño ha jugado muy bien y se le ha escapado el top ten por un pelo, tras irse al agua en el 18, algo que le ha pasado de forma dramática a otros como Bebb, Lorenzo Vera o el propio Els.
Rafa Cabrera Bello (-3) terminaba con una vuelta de 74 golpes y Carl Suneson (+1) hacía hoy 77 golpes.
