Se cumplieron los pronósticos y Steve Stricker ha sido designado capitán de Estados Unidos para la próxima Ryder Cup que se disputará en 2020 en Whistling Straits.
Se trata de una nominación histórica y nunca antes vista. Nadie pone en duda los logros de Stricker y su figura como jugador, pero será la primera vez que el capitán USA no tenga al menos un Grande en su palmarés. Han tenido que pasar 93 años (Walter Hagen fue el primer capitán americano en 1927), 43 ediciones y nada menos que 29 capitanes diferentes.
Stricker tampoco tiene un palmarés arrebatador. Ha logrado 26 victorias profesionales, doce de ellas en el PGA Tour y su mejor resultado en un Major fue segundo en el PGA Championship de 1998. Su récord en la Ryder Cup tampoco tira de espaldas. Ha jugado tres (2008, 2010 y 2012) y su balance es de once partidos, tres victorias, un empate y siete derrotas. Aunque, eso sí, ha sido una de las parejas más sólidas de Tiger Woods.
A favor de Stricker cuentan principalmente tres factores. Pese a ser un jugador de perfil bajo, es tremendamente respetado y querido por sus compañeros. Además, tiene experiencia como vicecapitán y fue capitán de Estados Unidos en la Presidents Cup de 2017, resuelta con victoria. Y por último, y no por ello menos importante, Whistling Straits se encuentra en Wisconsin, estado natal de Stricker. Juega en casa.
De este modo, los capitanes de la Ryder Cup 2020 serán Padraig Harrington y Steve Stricker. A bote pronto, y salvando las distancias, recuerda a la Ryder de 2014, aunque al revés. En aquella ocasión, el capitán de perfil bajo era Paul McGinley, que se tuvo que enfrentar a Tom Watson. Aquí, obviamente, por su trayectoria como jugador, con tres Grandes a sus espaldas, Harrington tiene más peso. En 2014 el pez pequeño se comió al grande con una paliza. Veremos qué ocurre dentro de un año y medio.
