Thongchai Jaidee (-6) se ha llevado el Open de Gales tras solventar con una tarjeta de 72 golpes (uno sobre par) una cuarta jornada que se iba complicando por momentos: bastante viento, frío y agua…
Gonzalo Fernández Castaño (-5) ha llegado a rondar también la victoria después de una excelente ronda de 67 golpes.
El tailandés, que suma ya cinco victorias en el circuito europeo (esta es la primera que consigue en Europa), protagonizaba la imagen del día al marcharse del green del hoyo 9 sonriendo abiertamente junto a su caddie después de firmar un doble bogey…
Son muchas las claves de un triunfo a lo largo de toda una semana. Pero nos quedamos, desde luego, con esa fotografía. No nos equivoquemos. Hay risas y risas. Sonrisas y sonrisas. Y no era la suya una mueca cínica y desesperada. No reía por no llorar. Era un gesto de borrón y cuenta nueva.
La liada de Jaidee en el 9, par 5, pudo haber sido aún mayor, es cierto (bola fuera de límites después de pegar su tercer tiro desde un bunker de calle), pero no hay que restar valor a la capacidad demostrada por el tailandés para aceptar los errores, que fueron unos cuantos y muy variados en un mismo hoyo. Excelente también fue el trabajo de su caddie en ese momento decisivo. Y el resultado de semejante actitud no pudo ser más rotundo: tres birdies consecutivos en los hoyos 10, 11 y 12 para recuperar el liderato y el control del torneo.
Tampoco se quedaba muy atrás la reacción de Gonzalo Fernández Castaño (-5), que respondía a un doble bogey en el hoyo 5, único lunar en su tarjeta, con birdies en el 7, 8, 9 y 11. El madrileño, como ya hiciera el jueves, ha dado lo mejor de sí mismo en una jornada ciertamente difícil por las condiciones de juego. De hecho, aún pudo llevar su registro más lejos de haber embocado una última opción de birdie en el 18 desde unos tres metros. Fernández Castaño recupera así el impulso y se postula de nuevo como candidato al equipo europeo de la Ryder.
Carlos del Moral (-1) tendrá que seguir esperando su momento. Hoy ha entregado una tarjeta de 74 golpes y, probablemente, la causa haya que buscarla en el juego corto (1/5 recuperaciones), faceta vital cuando las condiciones de juego son tan malas. Pero el valenciano acumula desde su 11º puesto un puñado de euros que revitalizan su temporada y, seguro, le aportarán tranquilidad y convicción.
