Inicio Masters de Augusta Masters de Augusta 2014 Por qué no te callas…

Por qué no te callas…

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Gonzalo Fernández-Castaño iba echando humo por las orejas al acabar la primera vuelta del Masters de Augusta. Fue un día perro, duro, luchado, incómodo por sus problemas con el drive, metiendo muchos putts delicados de par de esos que marcan el futuro en un torneo. Un día, en definitiva, de sangre y sudor, de pico y pala.

Aguantó como un jabato cuando bien podría haber terminado en la lona. Sin embargo, en el 18 llegó la puntilla. Justo cuando iba a ejecutar su tercer golpe, un delicadísimo putt desde fuera, con un green que recibía cuesta abajo y a toda velocidad, se escuchó un grito a pocos metros de Gonzalo. Era Nick Faldo desde su cabina de comentarista.

Evidentemente, damos por hecho que el inglés, ganador de tres chaquetas verdes, no era consciente de la presencia del madrileño cuando propinó su salida de tono, en cualquier caso, si alguien debe estar pendiente y tener cuidado es él, que se ha visto en esa misma situación miles de veces.

Fue la puntilla a un día que te lleva al límite. Gonzalo trató de contenerse y morderse la lengua, pero finalmente cargó con dureza contra la actitud de Faldo. “Justo cuando iba a pegarle a la bola, Faldo, que está en la cabina de comentaristas, se ha puesto a dar gritos y no sé si es que no me ha visto o si es tonto del culo, que es lo que muchos pensamos”, señaló.

Acto seguido quitó hierro a la situación y entonó el mea culpa. “En cualquier caso, son cosas que pasan y he tenido tiempo para recomponerme de esa situación y no he sabido hacerlo, así que también es culpa mía”, explicó con honradez el madrileño.

En cualquier caso, sus 75 golpes no son tan malos como pueda parecer. Nada más terminar de atender a los periodistas, Gonzalo salió disparado a la cancha de prácticas para tratar de enderezar el drive. Si mañana consigue encontrar el fariway, toda la lucha de hoy valdrá como oro en paño.