Inicio Blogs Carlota Ciganda «Y aún casi la emboca desde el búnker…»

«Y aún casi la emboca desde el búnker…»

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Cuando vi volar el híbrido que pegué de segundo en el hoyo 18 y al comprobar que la bola caía en el centro del green, a ocho metros de la bandera para eagle, pensé que el triunfo estaba casi hecho. Pero no, aún había que sufrir un poco más…

Salí al último hoyo con dos golpes de ventaja sobre Ursula Wikstrom. Mi primera victoria en el Ladies European Tour estaba un poquito más cerca, pero aún había que rematar. Me puso las cosas muy difíciles, fue una rival extraordinaria. Su segundo tiro se marchó al búnker y yo estaba a ocho metros de la bandera. Lo rozaba con los dedos. Sin embargo, realizó una sacada desde la arena soberbia, ¡estuvo a punto de embocar! De repente, se me pasó por la cabeza que tenía que hacer dos putts como fuera. Pero no. Finalmente su bola no entró, hizo el birdie y a mí ya me valía con tres putts. Aún así quería hacer el birdie, como los dos primeros días.

Mi primer putt se quedó a poco más de medio metro y metí el siguiente para birdie. Fue un gran broche final. Os cuento todo lo que hice el día de mi primer triunfo en el Ladies European Tour…
A pesar de que iba líder, decidí hacer toda mi rutina habitual, sin cambiar nada, lo normal. No quería hacer nada especial. Me levanté a las nueve de la mañana y me llegó un mensaje al móvil de que el campo estaba inundado, que se retrasaban las salidas dos horas. Pues nada, me lo tomé con mucha calma, desayuné con tranquilidad y llegué al campo sobre las 11.30.

Hice mi preparación habitual antes de cada vuelta. Primero pateé un poco y después pegué unas cuantas bolas en el campo de prácticas. Antes de empezar hablé con mi caddie, Javi Urquizu, y le dije que había que salir al campo a disfrutar, no pensar en el resultado y concentrarse sólo en hacer buenos swings. La clave era pegar buenos golpes y después ya veríamos si ganábamos o no.

Todo empezó bien con un birdie en el hoyo 1. Metí un muy buen putt de cuatro metros y la verdad es que jugué bastante bien. Cogí muchas calles y 17 greenes, algo muy importante en este campo, ya que los greenes son muy pequeños. El único bogey llegó en el 11, después de un tripateo tras fallar un putt tonto para par. Pero estaba tranquila. Me ayudó mucho Javi y, sobre todo, el hecho de coger tantos greenes. Estaba casi siempre pateando para birdie.

Después, Ursula hizo tres putts y falló la salida del 16 que le obligó a sacarla a calle y también hizo bogey. Tenía dos de ventaja y dos por jugar. Lo tenía bien, pero aún no había nada hecho. Un bogey y un birdie y ya estábamos empatadas otra vez. En el 17 pegué una  buena madera 3 y un hierro 8 sólido y la dejé a dos metros. Fallé el putt de birdie que casi habría sentenciado. Y en el 18 ya sabéis lo que pasó…

Estoy muy contenta. No encendí el móvil hasta que llegué al hotel a las siete de la tarde y tenía un montón de mensajes. Fue increíble ver el apoyo y las felicitaciones de tanta gente. Tengo que darles las gracias a todos. Os cuento una curiosa de todas las que he recibido. Anna Nordqvist me mandó un tweet dándome la enhorabuena y diciéndome que soy la mejor pateadora del mundo (jajaja). Yo le respondí que gracias y que sin duda la mejor con el putter es ella. Es una guasa que tenemos entre las dos y que viene de lejos. Fue en el British Amateur de 2007. Jugamos la final y gané yo. Aquel día las metí desde todos lados. Fue uno de esos días… Y Anna siempre que me ve o hablamos me lo recuerda. Pero vamos, que la mejor es ella. No he visto a nadie tocar la bola como ella con el putt.

Estoy muy feliz, aunque esta victoria no cambia nada. Siempre se puede mejorar y dar más. Ahora estoy jugando muy bien de tee a green y sabía que algo bueno podía llegar antes o después, pero aún puedo hacerlo mejor con el putt y eso es lo que voy a intentar ahora.
Lo celebré en Rotterdam con mi madre, mi tío, Javi (caddie) y su hermano, Íñigo. Fuimos a cenar a un mexicano. Es curioso porque mi madre tenía un vuelo para marcharse por la mañana, pero un accidente en la carretera le impidió llegar a tiempo para coger el avión y se tuvo que volver. Sin embargo, tampoco llegó a tiempo para ver nada de la vuelta. Así que ni se marchó ni llegó a tiempo al campo. Al menos, lo pudimos celebrar todos luego.

Quiero destacar especialmente el trabajo de Javi. Somos muy buenos amigos y me ha ayudado mucho. Él es muy tranquilo y sabe transmitírmelo de verdad. Me da confianza y seguridad. Estoy muy cómoda con él. Ayer fuimos hablando, tranquilos, sin nervios, disfrutando del día. Fue perfecto.

Por cierto, no me despido sin felicitar a Azahara por todo lo que está haciendo. Es increíble. Ahora, tercera. Impresionante. ¡¡Qué ganas tengo de que llegue el US Open y estar allí con ella, Belén Mozo y el hermano de Belén!!

Muchas gracias a todos por los ánimos y la energía que me habéis mandado. Ha sido genial. El triunfo también es para todos los que siempre estáis ahí.