Cuando Nacho Elvira cayó en el desempate ante el coreano Wang, aquí en Rabat, en 2016, nos marchamos con una espina clavada: habíamos estado a punto de vivir ‘in situ’ una jornada única, histórica, y teníamos la certeza de que era imposible que se repitiera algo así. Nuria Iturrios había ganado el torneo del LET en el mismo campo, casi a la misma hora, pero el doblete español se esfumaba en el último suspiro.
Jorge entra en una nueva y excitante dimensión
Tres años después, de nuevo Iturrios (qué coraje el de esta mujer) y en esta ocasión Jorge Campillo, han hecho realidad la irrealizable carambola. La certeza ahora es otra, pero en realidad muy similar: jamás de los jamases volveremos a vivir algo así. Las probabilidades matemáticas son ínfimas, entre otras cosas porque esta encrucijada, en la que se encuentran ellas y ellos en el mismo campo, la misma semana, apenas se da. Quién sabe, quizá el Ladies European Tour, como es su objetivo, consiga replicar más veces esta interesante dualidad.
Pero, muy probablemente, antes viviremos la victoria en varios Grandes (ellos y ellas) que un doblete de triunfos tan peculiar. Que aquí todos vamos cumpliendo años y esto no ocurre más que una vez en cien años, pongamos por caso.
Rahm irrumpe con fuerza en un selecto club de leyendas del golf europeo
En fin, Marruecos es tierra de promisión para el golf español, así que no cerremos tampoco las puertas con los pestillos del escepticismo, como hiciéramos hace tres años. Suman las chicas y los chicos cuatro victorias en los últimos cinco años. Una cosecha más que sobresaliente. Tengolf, mientras se pueda, seguirá viniendo cada año y quedando de nuevo prendado del Royal Golf Dar Es Salam, probablemente uno de los mejores complejos de golf del mundo, si nos atenemos sobre todo a la calidad de sus recorridos (hay tres), todos con la firma de Robert Trent Jones.
Campillo supera su techo en el ranking mundial
Ojalá pudiéramos ver este recorrido Rojo, sin ninguna duda uno de los dos o tres mejores campos de la temporada, año tras año, plantándole cara a los mejores jugadores del mundo. Esa es otra historia, aunque en Marruecos, como hemos comprobado, terminan encajando algunas carambolas imposibles.
Posdata: cuando estamos a los postres de la cena de celebración del triunfo de Campillo, se confirma la noticia de la victoria de Jon Rahm. La mega carambola. El acabose. Ni en más de doscientos años, allá por el 2250, cuando usted pueda jugar el Augusta National sentado en el salón de su casa, se repetirá nada semejante.
