Dos detalles.
El primero, imprescindible, porque verdaderamente representa a este equipo monumental:
Fernando Torres cede generoso el cuarto gol a Juan Mata y éste, después de marcar, se lo devuelve: «es tuyo, es tuyo», dice. Emociona tanto el rodillo de fútbol que es España con el balón en los pies, como el portentoso despliegue de ayudas, apoyos y coberturas cuando lo tiene el rival. Gracias.
El segundo, anecdótico, pero revelador:
Del Bosque explica en rueda de prensa su conversación con el Rey: «me lo ha pasado su hijo», dice de pasada. Y se queda tan ancho. Ni Altezas, ni Majestades. No se puede ser más llano, más normal, más extraordinario en su simpleza. Incluso, sin quererlo, vuelve a dar una lección de SENTIDO COMÚN al situar a la Corona a la altura de una plácida conversación de barra de bar.
