Faltan 761 días
Nadie encarna como Miguel Ángel Jiménez el archi-recurrente ‘carpe diem’ latino. Ya saben: vive el momento. Toma el día y exprímelo. No te distraigas esperando nada del mañana, ocupado como estás en el hoy.
El de Churriana aún va más allá. Porque uno de los grandes secretos de Miguel es su capacidad de cerrar capítulos a diario, uno detrás de otro y todos los que sean necesarios. Si toca desayunar, se desayuna. Si entrenar, se entrena. Si cenar, se cena. Y si hay que jugar al golf, se juega. Nada debe solaparse, mientras sea posible. Así, en el hoyo 3 no se piensa en las gambas de Palamós, y en el restaurante de turno, con las gambas de Palamós delante, no se piensa en el hoyo 3…
