“¿Cuántos torneos crees que podrías haber ganado este año si hubieras pateado como esta semana?”
La pregunta se la hacían a Scottie Scheffler el pasado domingo, minutos después de proclamarse ganador del Hero World Challenge, durante la rueda de prensa del campeón.
“No tengo ni idea”, respondió el texano. Y añadía sonriendo: “Lo único que sabía es que me ibais a hacer esta pregunta”.
No tenemos la certeza acerca de si Scheffler se habrá puesto en algún momento a hacer números contantes y sonantes de lo que pudo ser y no fue por su irregular y hasta deficiente desempeño con el putter en las manos, en comparación con el resto de competidores. Pero una idea aproximada si tiene, de eso no cabe duda…
Por si acaso, nos hemos puesto a bucear en algunas cifras. Resulta osado afirmar con rotundidad que tal o cual jugador hubiera ganado un torneo de haber, por ejemplo, pateado un poco mejor. Sin embargo, hay algunas estadísticas que arrojan pistas más que razonables.
¿Cuántos torneos pudo haber ganado Scottie Scheffler en la temporada 2022-23, además de los dos que ganó, de haber pateado moderadamente mejor? Esta es la gran pregunta. Lo que hemos hecho es centrarnos en la estadística de Strokes Gained:Putting, o lo que es lo mismo, los golpes ganados o perdidos en los greenes en relación a la media de los competidores en un torneo concreto. A partir de aquí, lanzamos una batería de registros reales, puros y duros, y hasta nos atrevemos a establecer algunas conclusiones. Que cada cual saque las suyas, por otro lado. Incluido Scottie.
– En doce torneos de los 22 evaluados Scheffler se fue a un valor negativo en SG:Putting. Además, en el Masters, torneo en el que no se facilita dicha estadística, terminaba como el peor jugador de aquellos que pasaron el corte en la estadística de media de putts en greenes en regulación (1,76 putts por green en regulación).
– Su mejor registro en SG:Putting se dio en Phoenix, donde obtuvo una ventaja de 4,15 golpes respecto a la media de los competidores, lo que le valió para terminar 13º en esta estadística… Y también para ganar el torneo. Nunca, por tanto, atendiendo a esta estadística, terminó entre los diez mejores pateadores (anotemos también que en el Sentry, con un SG:Putting de 2,15, terminaba en el puesto 12º en esta estadística).
– En el THE PLAYERS, su otra victoria de la temporada, ni siquiera necesitó llegar tan lejos: le valió con acabar el 48º en SG:Putting, con un saldo positivo de sólo 0,1 golpes ganados a la media. Así de excelso sería su juego de tee a green… (En efecto, fue 5º en la estadística de SG:Off the tee, 4º en la de SG:Approach to green y 4º en la de SG:Around the green, siendo además el jugador que cogió más greenes en regulación).
– En el Arnold Palmer terminaba en cuarta posición, a sólo dos golpes del ganador, Kurt Kitayama. En ese torneo el SG:Putting de Scheffler se quedó en una gris 54ª posición, con un -0,9, es decir, perdió un golpe respecto a la media, mientras que el del ganador se fue a 5,6… Como se ve, una diferencia de más de seis golpes. Aunque Kitayama, en efecto fue de los tres mejores pateadores aquella semana, a Scottie seguramente le habría valido acabar el 35º en SG:Putting para ganar el torneo.
– En el PGA y el US Open, dos de los cuatro Grandes, el texano terminaba en segunda y tercera posición, respectivamente, a dos y tres golpes de Brooks Koepka y Wyndham Clark, los respectivos ganadores. En ambos torneos Scheffler pateó más que decentemente, con un SG:Putting favorable, pero algo lejos de los mejores: ni siquiera terminaba entre los treinta mejores en ambos casos, mientras que Koepka fue el 13º en la estadística y Clark el 4º. Ni siquiera hubiera tenido que llegar al nivel de estos dos jugadores en los greenes para haberse dado una buena oportunidad de victoria en ambos casos.
– En el Charles Schwab Challenge terminaba tercero, a un solo golpe del desempate que jugaron Grillo y Schenk. Su SG:Putting, con un valor de -4,56, se fue al puesto 71º, el penúltimo de los 72 jugadores que pasaron el corte. De locos. Incluso un puesto 60º en esta estadística podría haberle valido para ganar el torneo con cierta comodidad.
– En el Memorial, más de lo mismo, si acaso aún más trágico. Terminaba tercero, a un solo golpe del desempate que jugaron Hovland y McCarthy, pero es que el SG:Putting de Scheffler fue el peor de los 65 jugadores que pasaron el corte (-8,51), quedándose a más de catorce golpes de Hovland (6,06) y a más de diecinueve de McCarthy (11,27) en esta estadística. Esta fue la única ocasión en la que de una manera pública y directa Scottie llegó a decir que sólo con haber pateado un poquito mejor se habría llevado el torneo de calle. Y tenía toda la razón, como se ve.
– Ya en los play offs de la Fedex, en el BMW, con cincuenta jugadores en liza, Scheffler acababa en segunda posición el torneo, a sólo dos golpes del ganador, Hovland, pero es que su SG:Putting se iba al puesto 38º (de cincuenta jugadores, ojo) con un valor de -1,89, a ocho golpes del noruego en la estadística (6,13).
– En el Tour Championship, la final de los play offs, su SG:Putting fue el peor de los treinta jugadores, aunque da la sensación de que en esta ocasión, ni siquiera habiendo pateado medianamente bien habría superado al ganador, de nuevo Hovland.
– En otros torneos como el Byron Nelson, donde acababa quito a tres golpes del ganador; el Travelers, donde terminaba cuarto a cuatro golpes del ganador; o incluso el Scottish Open, donde era tercero, a cinco golpes del ganador, tampoco terminaba siquiera entre los cuarenta mejores pateadores según el SG:Putting…
– En el Open, en Royal Liverpool, sufrió también lo indecible: su SG:Putting se iba a -4,62, tan lejos del valor en esta estadística alcanzado por el ganador, Brian Harman, que se fue a un galáctico 11,57, siendo de largo el mejor pateador de la semana (la diferencia entre ambos en esta estadística se iba más allá de los 16 golpes, aunque también es cierto que Harman le saco 13 golpes en la clasificación).
– A modo de conclusión y tratando de ser prudentes, diríase que Scheffler bien pudo haber ganado tres torneos más en 2023 con toda seguridad (Charles Schwab, Memorial y BMW) de haber pateado sólo un poquito mejor, sin siquiera meterse entre los mejores pateadores de la semana, simplemente con no haber sido de los peores. Rizando el rizo, diríase asimismo que podría haber sumado algún Grande más de haberse metido en el top 20 de SG:Putting en las semanas del PGA y el US Open. Casi nada.
Pese a todo, es el indiscutible Número Uno del mundo sin siquiera haber sido uno de los diez mejores pateadores en ninguno de los torneos que ha jugado en esta última temporada, y habiéndose metido sólo en dos ocasiones entre los veinte mejores… Un caso digno de estudio. Y una bendita locura su consistencia de tee a green.
