Hace ocho años Roger Rowland ganó la lista de ganancias del Sunbelt Seniors Tour, un pequeño circuito de Florida donde sólo se puede jugar si tienes más de 45 años. Rowland, un humilde profesor de golf de club, tenía 47 cuando ganó la lista de ganancias. Al año siguiente le hizo una confesión al Wall Street Journal. «Si acabo el año con saldo positivo en mi cuenta jugando en este mini tour, creo que tengo una posibilidad más que razonable de jugar en el Champions Tour«. El Champions Tour, ya lo saben, es el circuito senior más importante que existe, el Olimpo de jugadores mayores de 50 años.
Esta semana, lo que parecía una fanfarronada de Rowland, jugador que apenas había disputado algún que otro torneo del web.com Tour con muy poco éxito, se ha hecho realidad. A sus 54 años se ha sacado la tarjeta del PGA Tour Champions mediante la escuela. Ha sido uno de los cinco mejores que ha logrado los derechos de juego completos. Sí, jugará con Bernhard Langer, Ernie Els, Miguel Ángel Jiménez y compañía. Nunca es tarde para vivir tu particular sueño americano.
Un caso similar es el de Rob Labritz, profesor de golf de largo recorrido en Nueva York. Nunca tuvo la tarjeta del PGA Tour ni nada parecido, aunque se trata de un fantástico jugador de golf. No en vano, ha ganado en ocho ocasiones el PGA Championship, clasficándose siempre al ser uno de los mejores profesionales del club de Estados Unidos. Dos de esas ocho veces fue el mejor pro de club del PGA, en 2010 en Whistling Straits y en 2019 en Bethpage. Además, ha ganado tres veces el New York State Open, pero jamás tuvo la tarjeta del PGA Tour.
Labritz, que ganó la Escuela, declaró a acabar: «Esto es para lo que he trabajado toda mi vida. Cada bola que he pegado en mi carrera ha sido pensando en esto. Va a ser muy importante, pero también muy divertido», explicó emocionado.