Rickie Fowler provocó ayer el delirio de Ernie Els y todos los presentes durante la celebración del Cigar Aficionado-Wine Spectator Pro Am, un torneo benéfico que contó con la presencia de algunos de los mejores jugadores del PGA Tour y que se celebró en el recorrido Old Palm Golf Club, en Palm Beach, Florida.
Fowler consiguió un hoyo en uno y ganó nada menos que un millón de dólares que irán destinados de manera íntegra a la Fundación de Ernie Els que lucha contra el autismo infantil. La reacción del sudafricano, cogiendo en brazos a Fowler y prácticamente manteándolo estaba más que justificada. No es exagerado decir que Els estaba más feliz que cuando ganó cualquiera de sus cuatro grandes. Fue una explosión de alegría. Aquí tienen el vídeo…
El golpazo de Fowler tiene aún más mérito si tenemos en cuenta que no pegó con su palo, sino con el pitching wedge de Luke Donald, y ya se había quitado los zapatos de golf. La bandera estaba a 113 yardas. La reacción del golfista inglés en las redes sociales resumen perfectamente lo que prácticamente todo el mundo piensa a día de hoy sobre Fowler: «¡Este chico nunca hace nada mal!».
Me in the pink, picking up my trampled on club. What a shot, what a moment, so happy for The Els and their charity https://t.co/YzbvN3TXb4
— Luke Donald (@LukeDonald) 8 de marzo de 2016
The boy can do no wrong! @RickieFowler makes a hole in one to win $1 million at Els For Autism Pro am today #changinglives #AtaKid
— Luke Donald (@LukeDonald) 7 de marzo de 2016
La emoción de Ernie Els está más que justificada. El sudafricano está absolutamente implicado con su fundación, no en vano hay que recordar que tiene un hijo que sufre este mismo problema y es una de las razones por las que decidió mudar su residencia a Florida.
Sólo nos queda una pregunta final para rematar esta historia: ¿Cómo puede ser que Miguel Ángel Jiménez no esté en un Pro-Am que se llama Cigar Aficionado-Wine Spectator?