El entusiasmo que despertó la audaz iniciativa del circuito europeo de la Race to Dubai, flaquea y el proyecto se tambalea por momentos…Este nuevo formato, patrocinado por la empresa Leisure Corp., celebra su primera edición este año y ofrece golosos premios en metálico a sus participantes, entre ellos el más grande nunca ofrecido a un deportista: 20 millones de dólares. Pero Leisure Corp. está en horas bajas. La crisis económica es global y el mundo del deporte no es una excepción…
Durante la celebración del British Open en Turnberry (Escocia), Ten-Golf tuvo la oportunidad de pulsar la opinión de medios de todo el mundo especializados en golf. La impresión era generalizada: peligra, y mucho, la celebración de la segunda edición (la de 2010) de la Race to Dubai.
Numerosos profesionales del golf, atraídos por la gloria y las ganancias que ofrecía el nuevo circuito europeo, habían ya trastocado sus planes. De hecho, Camilo Villegas y Anthony Kim, dos habituales del PGA Tour, este año eran miembros inscritos del circuito europeo, precisamente por la Race to Dubai. El propio Phil Mickelson había anunciado que se estaba planteando muy en serio dedicar más tiempo y energía competitivos a la invención de Leisure Corp.
La evolución de la crisis dictará sentencia. Es posible que la Race to Dubai, después de todo, se convierta en el más ambicioso proyecto competitivo del circuito europeo … y el más corto.
