Una de las peores interpretaciones de conceptos del swing en la historia ha sido sin duda la frase «has levantado la cabeza»…
El problema tiene su origen en una mala traducción del inglés. El concepto británico es “keep your head still”, es decir, “mantén tu cabeza quieta”. Incluso, a día de hoy me encuentro a alumnos que tienen grandes problemas en el swing y cuando profundizas te das cuenta de que el gran problema reside en esta pequeña frase.
La idea de no levantar la cabeza produce un serio problema. De tanto mirar a la bola resulta que al final terminamos por agachar la cabeza para no dejar de mirarla.
Esto provoca una reacción en cadena. Veamos qué sucede…
1. Nuestra postura se sitúa muy encima de la bola y demasiado cerca de ella.
2. El plano del swing es excesivamente vertical debido a que es mucho más fácil levantar el palo con las manos y los brazos que girar el cuerpo.
3. Este plano vertical irá acompañado casi con total seguridad de un uso excesivo de las manos, lo que producirá un over-swing, es decir, sobrepasaremos la horizontal como tope del backswing y esto nos generará un peso excesivo en el pie izquierdo.
4. Como esta postura provoca levantar el palo y no girar, la rodilla izquierda trabajará en un plano excesivamente vertical, por lo que se flexionará hacia abajo y no se desplazará hacia la derecha con el resto del cuerpo durante el giro. Este movimiento crea asimismo un peso excesivo en el pie izquierdo y, como consecuencia, un plano vertical.
La función básica del juego de pesos es preparar al cuerpo para conseguir una posición potente sujeta al suelo para poder lanzar la cabeza del palo hacia la bola. Así las cosas, el peso, a medida que el cuerpo gira hacia la derecha en la subida, se carga también en el pie derecho y desde ahí lanzamos. Todas las acciones que generemos en la subida crean una reacción en la bajada, así que el peso en la izquierda en la subida genera que el peso esté en la derecha en la bajada.
5. Este plano vertical que hemos generado debido a la posición agachada de la cabeza, reduce el radio de nuestros hombros respecto a la bola y genera una sensación de falta de espacio que se traducirá en un des-giro excesivo de las caderas y hombros para generar ése espacio, produciendo un golpe que viene desde arriba y por fuera de la línea.
El concepto americano de “keep your head still” proviene de la época de Jack Nicklaus. Su profesor, Jack Grout, solía agarrar al joven Nicklaus del pelo para que no desplazase la cabeza hacia la derecha en la subida y así mantener mejor el eje de la espina dorsal. Una mala traducción se convirtió en un mito que todavía persiste y, lo que es peor, incluso se enseña.
Un jugador que ha estado toda su vida “mirando a la bola” para intentar “no levantar la cabeza” tiene una sensación en su cerebro que resulta muy difícil corregir. Cuando comienza a girar para trabajar en un plano más correcto tiene la impresión de que pierde la bola de la vista y que el swing se convierte en un descontrol total.
Precisamente, esa sensación de que su swing se mueva como una puerta que abre y cierra es justamente la que debe buscar. Siga los pasos siguientes y mejorará.
1. Ponga la bola sobre un tee alto y utilice un hierro 5. Arrancando el golpe desde una posición sustentada en el aire y junto a la bola.
2. Colóquese en una postura en la que su espalda se encuentre más vertical y un poquito más alejada que la posición antigua.
3. Incline un poco su cabeza hacia el hombro derecho, así podrá ver la bola con el rabillo del ojo izquierdo.
4. Alinéese correctamente y deje que su codo derecho se encuentre algo doblado hacia el abdomen.
5. Compruebe que las “V” de las manos apunten al hombro derecho.
6. Imagine que con la mano derecha lanza un canto rodado para que salte sobre el agua. El movimiento es muy similar.
7. Confíe en sí mismo. Elimine de su mente todos los conceptos anteriores y simplemente pegue a la bola.
Verá como ya tiene espacio suficiente y rápidamente mejoran sus sensaciones, puesto que ya realizará el swing más horizontal, podrá realizar golpes fluidos y con efecto a la izquierda.
