Inicio Blogs El blog del Profesor Marcos Sobrón Padres e hijos en el campo: dónde, por qué y cómo

Padres e hijos en el campo: dónde, por qué y cómo

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Nuestra función de padres cuando estamos en el campo de golf con nuestros hijos es instruirles. El deporte del golf tiene una connotación que muy problablemente en otro tipo de deportes no se ve tan acentuada. Es, nada más y nada menos, que la veteranía…

Ser un jugador adulto significa que debes ser capaz de analizar y ejecutar los golpes que el campo y las circunstancias te requieran para cada momento.

Tal y como en la vida misma, vivir el presente, lo que estás haciendo, sin exigirte más de lo debido según tus posibilidades como jugador, hace que logremos desarrollar en nuestro juego la experiencia que nos llevará a la veteranía.

Cuantas más experiencias logremos vivir conforme se desarrollan en el campo, más experiencias acumularemos en nuestro sub-consciente, de manera que, de volver a suceder, en situaciones similares nos hará conscientes de lo que debemos hacer.

Con los niños, la aportación del padre siempre debe ser la de hacer que los niños jueguen cada golpe lo mejor posible de acuerdo a sus posibilidades técnicas reales. Como gran defensor de los padres en la enseñanza del golf a nuestros hijos, considero que nuestra función principal es hacerles vivir el momento presente del golpe que va a ejecutar.

A los padres de mis alumnos, procuro darles toda la responsabilidad en el apoyo a su joven jugador y por ello les pido que mientras estén junto a sus hijos enfoquen sus esfuerzos en todo aquello que tanto ellos como los niños puedan controlar.

Tres preguntas básicas se convierten en armas fundamentales para crear experiencias que sean acumuladas en el sub-consciente y generen veteranía.

Donde, Por Qué y Cómo.

Cada vez que un niño vaya a ejecutar un golpe debemos dejarle elegir y decidir, pero eso sí razonando en voz alta siguiendo las tres preguntas. Una vez ejecutado el  golpe y visto el resultado podemos hacerles la reflexión oportuna e incluso podemos invitarle a probar a ejecutar el golpe de nuevo pero siguiendo nuestros criterios.

¿A dónde quieres tirar?

¿Por qué quieres tirar allí?

¿Cómo vas a hacerlo para que salga bien?

El golf no se puede enseñar, tán sólo se puede aprender. Debido a esa condición, debemos crear la atmósfera correcta para que el niño aprenda y al mismo tiempo nos daremos cuenta de lo que nuestros hijos son capaces de hacer y de esta manera les conoceremos más como jugadores.

Lo importante es que los padres no entremos en lo que no podemos dominar. Es decir, la técnica. Puesto que la técnica durante el swing del golpe es la única parte que ni siquiera el jugador puede controlar totalmente y por ello nuestra función de compañero de viaje está en ayudarles a desarrollar un método que les genere experiencia durante el razonamiento y el orden de colocación.

¡¡¡Dónde, Por Qué y Cómo. Ánimo Papás!!! Vamos a ayudar a nuestros hijos a ser más veteranos en el campo.