Por Lucas Montaner, profesional del Real Club de Golf de Sevilla
Explicábamos hace una semana que los profesionales y los hándicaps bajos eran, a priori, los únicos jugadores que se pueden sentir 'obligados' a intentar hacer dos golpes en un diámetro de 50 metros a la bandera…
Además, invitaba al resto de jugadores a intentar no sumar más de tres golpes a esta misma distancia. Pues bien, esta sería una buena estrategia en la que pensar antes de iniciar un recorrido: nuestro objetivo va a ser intentar que alrededor del green no sumemos más de tres golpes en ningún hoyo.
Indirectamente esto va a influir en gran medida en aspectos psicológicos y tácticos:
– Psicológicos: porque en cuanto estemos a 50 metros o menos de distancia de la bandera, nuestra concentración aumentará, ya que tenemos un objetivo que cumplir. No es fácil mantenerse concentrado durante las más de 4 horas que dura un torneo y en más de una ocasión la relajación nos puede hacer cometer errores, unos errores que si estuviéramos con los cinco sentidos puestos no sucederían. Nuestra estrategia hará que nos concentremos de una manera especial en el juego corto, y evitará tripateos tontos, saltos de rana, o algún topazo inesperado.
– Tácticos: porque esta estrategia nos hará ser algo más conservadores ante posiciones de bandera difíciles. Tirar a bandera siempre es una tentación, pero a veces aprochando o desde búnker hay que afinar mucho para dejar la bola cerca. Este riesgo nos puede hacer mandar la bola al bunker en lugar de al green y sumar golpes inesperados. Según nuestra estrategia, nos vale meterla en green de un golpe y patear dos veces, así que podemos ser un poco más conservadores a la hora de apuntar, buscando zonas más anchas del green o, incluso, simplemente el centro del green…
Espero que siga los consejos dados en estas dos últimas clases sobre el juego corto. Verá como el número de golpes en su tarjeta descienden y le dará al juego corto la importancia que se merece.
