José Luis Márquez, profesional de golf y colaborador de nuestra página, ha aceptado realizar un experimento que TenGolf le ha propuesto…
Márquez se encuentra en la actualidad disputando el Sata Azores Open, un torneo invitacional que se viene celebrando en las Islas Azores desde 1980, hoy dirigido por Luis Indio, con presencia de profesionales de muchos puntos del mundo: españoles, portugueses, argentinos, canadienses, norteamericanos, ingleses, escoceses.
Alberto Rodríguez, toda una institución en el golf español, es el 'contacto' que la organización del torneo tiene en nuestro país y es el encargado de llevar a diferentes jugadores. Para que se hagan una idea, allí han jugado hoy martes la primera jornada José María Cañizares o Pedro Linhart… Rodríguez, entre otras cosas, ha sido caddie de Cañizares en muchísismos torneos, incluyendo más de un British Open… En la presente edición existe mucha expectación con la presencia de un joven canadiense, Victor Ciesielski, amateur de 21 años de quien se dice en Canadá que es su nuevo Mike Weir por talento y proyección. El 'angelito', al parecer, va a firmar con Nike un contrato de 5 millones de euros en cuanto se haga profesional.
Pues bien, Márquez también ha acudido a las Azores de la mano de Alberto Rodríguez y allí está jugando. El experimento consiste en 'impartir' una clase práctica al finalizar cada jornada. José Luis nos va a resaltar alguna situación complicada que ha vivido en su vuelta, resuelta negativamente (de los errores se aprende) y alguna situación, por el contrario, que tras una decisión difícil de tomar, ha sido resuelta con éxito.
Por JOSE LUIS MÁRQUEZ, profesional de Golf, de Snake Eyes Golf Spain
UN ERROR: En esta primera jornada del Sata Azores Open los jugadores hemos tenido un gran problema: este recorrido de nombre Batalha no tiene riego artificial en las calles, dado que aquí llueve mucho. Sin embargo, lleva sin caer ni una gota desde hace dos semanas y nos hemos encontrado unas calles muy irregulares, con muchas zonas sin hierba, muy dura… La primera lección que se puede sacar es esta precisamente: hay que estar preparado para adaptarse a las condiciones que te tocan. Con el piso en ese estado, mi error ha sido en más de una ocasión no haber golpeado a la bola más limpiamente. El modo de adaptarse a un terreno así es precisamente ese: golpear de un modo muy limpio y directo. Para conseguirlo, nos puede ayudar ponernos la bola más al pie izquierdo (en el caso de los diestros); y hay que tener en cuenta, a la hora de elegir el palo, que al subir más la bola podemos perder un poco de distancia.
UNA DECISIÓN BIEN TOMADA: En el hoyo 12 me encontraba en calle a unos 160 metros del green. Tenía viento en contra y el green, además, estaba en alto. La toma de decisiones a la hora de elegir el palo es muy importante. Considerando todos los condicionantes elegí un hierro 3 y realmente me parecía mucho palo… Dudé y finalmente tomé la decisión al ciento por ciento. Dos lecciones se pueden comentar de esta situación. Por un lado, tener en cuenta los desniveles y el viento en la elección de palo; en este caso se trataba de coger más palo al estar el green en alto y tener viento en contra. Y la segunda lección es sencilla de decir, pero no siempre fácil de poner en práctica: una vez que tomamos una decisión, hay que comprometerse con ella al ciento por ciento. Las dudas son un mal enemigo en el golf… Y en la vida. Así lo hice y acerté: dejé la bola a un metro de bandera y hasta recibí algún aplauso de dos compañeros españoles que estaban en el siguiente tee y que vieron todo el golpe…
Posdata final: sólo tres jugadores finalizaron la primera jornada por debajo del par. El líder es el canadiense Lee Curry (-2). José María Cañizares (+1) marcha en séptima posición y Pedro Linhart (+3), que jugó el pasado dmingo un desempate en el campeoato de España, ocupa la decimocuarta plaza. José Luis Márquez (+10) está en el puesto 36… con los mismos golpes que el joven talento canadiense, Victor Ciesielski. El torneo consta de tres jornadas, sin corte, y lo disputan 52 jugadores.
