“¿Son ya las 6:30? ¿En serio? No me creo que esté sonando ya el maldito despertador…”; “Tendría que haber hecho caso a mi padre y haber estudiado para funcionario…”; “Si es que no puedo mover el cuerpo, me estoy dando demasiada caña en el gimnasio…”; “Paso, me doy la vuelta y que salga el sol por Antequera…”.
“Bueno, venga chaval, que al final no es para tanto. Los entrenos son duros pero seguro que dan frutos…”; “Ya estoy despierto y no me voy a poder volver a dormir, y si llego tarde a la sesión de físico me va a tocar correr aún más…”. “Además en unos días tengo el Campeonato de España en Catalayud y la Escuela del Alps, y le estoy pegando bien pero aún puedo afinar más…”.
Aunque no se lo crean todos los días sigo un proceso mental parecido a éste cuando mi despertador suena a las 6:30 para iniciar mi rutina de entrenamientos.
Ahora que estamos a pocas semanas de dos pruebas importantes en mi calendario (Campeonato de España y Escuela del Alps), mi rutina se resume principalmente en una sesión de físico de aproximadamente hora y media nada más comenzar el día, seguida de otra sesión de approach y putt de otra hora y media. Después comienzo las obligaciones laborales del día con mis alumnos para concluir con otra sesión técnica en la cancha de prácticas que suelo terminar sobre las 23:00. Y entre medias tengo que incorporar la atención a patrocinadores (benditos sean), redes sociales y alguna ronda de prácticas en el campo. Menos mal que mi pareja es una santa…
Y es que no creáis que la vida del deportista profesional es todo vino y rosas. Como el resto, tenemos que compaginar vida laboral y personal y hacer los mismos equilibrios. Pero es verdad que nuestra profesión es tan bonita y que está llena de momentos especiales que justifican los madrugones, los viajes, el frío en invierno, el agua en otoño y el calor en verano. A mí me gusta tanto a lo que me dedico y tengo tanta ilusión por triunfar que si tuviera que adelantar aún más el despertador, lo haría. Aunque seguiría refunfuñando unos pocos minutos cada día, como todo hijo de vecino…
David Salgado, es jugador profesional de golf y competirá en la Escuela Clasificatoria del Alps Tour entre el 4 y el 10 de noviembre.