Primera jornada en el Peugeot Tour Alps de Barcelona en San Cugat. He salido a jugar por el tee del hoyo 8 a las 9,05 de la mañana junto a Txomin Hospital y Pablo Larrazábal. Día soleado, sin viento, buenas condiciones…
Hoy me han salido las cosas. He hecho 65 golpes, cinco bajo. La verdad es que yo no soy de ponerme muy nervioso, pero esta vez sí que lo estaba antes de pegar en el primer tee del día. Me ha salido un gran drive en el hoyo 8, que era mi primer hoyo del día, y eso me ha ayudado a tranquilizarme. Además, he acabado con birdie metiendo un putt de metro y medio, más o menos, así que todo ha ayudado. A Txomin y a Pablo ya los conocía y ha sido un partido espectacular. Me han ayudado y ha sido muy divertido. Txomin es un gran jugador y Pablo es de ese tipo de jugadores que me encanta, muy natural, con mucho talento.
Hoy he cogido los 18 greenes. Y después de cinco hoyos iba tres abajo en el día. El segundo birdie del día lo metí desde unos tres metros en el hoyo 10, el tercero de mi vuelta, y en el hoyo 12 pegué un gran tiro a green con el hierro 9 y luego metí el putt desde algo más de un metro.
El único bogey del día lo he hecho en el 16 haciendo tres putts. El primero lo tiré muy largo y luego no metí el de vuelta de un metro porque pegué un manotazo.
La verdad es que he pateado bien. E incluso me he dejado algunas buenas oportunidades por el camino: en el hoyo 1, en el 2, en el 6… En el 7 he pateado para eagle y he hecho el birdie fácil. Estoy muy contento, por supuesto, pero me lo tomo con tranquilidad.
Estaba haciendo vueltas demasiado cargadas y un resultado como éste siempre ayuda. La semana pasada, por ejemplo, es imposible decir que has jugado bien al golf si acabas con ochenta y tantos golpes, lo sé, pero también era cierto que yo sentía que estaba dando muy buenos golpes. También ves que el entrenamiento tiene su recompensa. Esta semana, aquí en San Cugat, fui cogiendo confianza y la verdad es que el campo me entró por los ojos enseguida.
Después de jugar he mantenido la rutina de siempre, no cambia nada. La verdad es que te quedas muy satisfecho y la gente se cruza contigo y te felicita, pero este resultado en realidad no cambia nada, no significa nada especial. Es bonito porque este año sólo había conseguido hacer una tarjeta bajo par en la Copa Andalucía, pero nada más.
Mañana salgo a las 13,40. Ya os contaré cómo van las cosas…
