Llegamos a Bangkok y la primera sorpresa nos aguarda a la salida del aeropuerto. Voy con mi amigo Constantino Rocca y nos quedamos de piedra…
Las calles están empapeladas con nuestras fotos. Nos han metido en la cartelería del torneo, el Thailand Masters, que se juega esta semana. Nos tienen mucho cariño en estas tierras desde que jugamos aquí el torneo de la PGA de Tailandia hace unos meses. Nos tratan como, como se dice, ¿marajás? Pues eso…
Nos recoge un coche y el conductor nos suelta: «ustedes deben ser muy importantes porque sus fotos están por todos los lados»…
El torneo está a punto de empezar y el calor y la humedad siguen siendo terribles. Lo bueno es que ya estamos más acostumbrados tras lo que vivimos en Brunei la semana pasada. Si es que te puedes acostumbrar a más de un ochenta por ciento de humedad y casi cuarenta grados…
El fin de semana en Bangkok se presenta movidito, y no sólo por los greenes del Royal Gems Golf Club. Hay previstas unas movilizaciones contra el gobierno bastante importantes y han decidido cambiarnos de hotel. Nos han llevado al resort del campo. Es todo un asunto de precaución, que nadie se preocupe porque nos han garantizado la seguridad…
Ya os contaré cómo ha ido todo…
