Lo bueno que me llevo de Alemania y la espinita que se me quedó clavada
Ya estoy en Barcelona de vuelta después de 17 horas conduciendo con Alberto Calvo, el caddie de Guido Migliozzi. Tras muchas semanas sin coger un avión, lo cual es una bendición en una profesión como la nuestra, decidimos hacer este viaje en coche. Nos fuimos turnando du