El Alfred Dunhill Links Championship ha vuelto a poner de manifiesto que Martin Kaymer es el jugador más en forma del continente y que no hay quien se resista a los británicos cuando el golf merodea los links…
Kaymer es el primer jugador que supera esta temporada los 300 puntos en la Clasificación Mundial Ten-Golf. Para eso hay que sumar mucho.
Vean, si no: 4 primeros puestos (entre ellos un Grande), un tercero (W.G.C.), un cuarto, un sexto, un séptimo y un octavo. Casi nada. Muchos top ten y, sobre todo, en citas de máximo nivel. No es difícil entender que Kaymer sea ya un símbolo en Alemania. Sólo con sus actuaciones, más una ligera ayuda de Cejka y Siem, ha colocado al país teutón en la pelea por la quinta plaza mundial. Esto son palabras mayores.
Precisamente, en esa pelea está incrustada España. Este fin de semana ha dado un paso hacia delante con la inestimable ayuda de Álvaro Quirós. Su quinto puesto nos otorgan siete puntos muy ricos, que nos acercan a Suecia (a 15 puntos) y a Irlanda del Norte (a 22). El Portugal Masters bien podría dar un vuelco en este sentido.
El Dunhill Links también ha puesto de manifiesto la supremacía británica en su territorio. Inglaterra ha sumado la friolera de 65 puntos con seis jugadores diferentes, algo que sólo está al alcance de Estados Unidos en el PGA Tour. Sólo en una ocasión esta temporada han mejorado esta actuación. Fue, cómo no, en Wentworth, otro territorio muy suyo. Allí sumaron 84 puntos con siete jugadores diferentes. En Munich, con motivo del BMW International, llegaron a los 85 puntos, pero sólo sumaron tres golfistas.
El Circuito Europeo le roba protagonismo en este final de temporada al PGA Tour. Los torneos de la Series de Otoño, apenas alcanzan la categoría Primera y con muchas dificultades. Sin embargo, en el Viejo Continente disfrutamos de torneos de categoría Especial.
