Jiyai Shin (-10) y Karrie Webb (-7) van a a jugarse la victoria del British después de haber dejado unas cuantas cosas claras en la primera de las dos vueltas del domingo…
A la coreana apenas le altera nada. Hoy ha sufrido con el viento, como todas, pero ha sabido esperar su momento para terminar entregando una lúcida tarjeta de uno bajo par con un birdie en el 18 desde un metro tras pegar drive, madera 3 y un aprochito medido desde 25 metros.
Ella sabe que difícilmente se sale de swing… Une a ese temple génetico de la raza oriental una forja casi ascética en el campo de prácticas. El pasado mes de mayo fue operada de la mano izquierda, porque tenía una pequeña fractura en la palma de dicha extremidad. ¿Saben cómo se produjo esa dolorosa fisura ósea? Ella no tiene la explicación concreta, porque no fue a causa de un traumatismo (una caída, un golpe). Y bromea cuando lo explica: “muchas compañeras me han dicho que eso me pasa por practicar tanto”… Pues, en efecto, es muy probable que por ahí vayan los tiros. Fractura por estrés. De tanto practicar.
Karrie Webb, a sus 37 años, es una guerrera veterana. Un talento natural del golf que aún da guerra guerra. Un prodigio que ya estaba en el Salón de la Fama con solo treinta años. Y un satélite andante que detecta y procesa cada racha de viento. Es la única jugadora que ha sido capaz de jugar esta mañana por debajo de setenta golpes (68). No gana un ‘major’ desde hace seis años (suma siete, un British entre ellos, aunque ganó dos más antes de 2001, cuando todavía no era considerado un Grande) y seguramente piensa que va siendo hora. Veremos si la ansiedad no le juega una mala pasada en la última ronda, aunque experiencia ganadora le sobra.
Otras candidatas como Inbee Park (-4) y Mika Miyazato (-3) han aguantado el tipo para mantenerse a la estela. Una estela muy larga, en todo caso. Y ante Shin no basta con mantener el tipo. Tampoco ante esta Karrie Webb.
Las dos españolas presentes en la jornada final a dos vueltas (36 hoyos) del British han luchado con desigual suerte en la primera de las dos rondas, pero con la misma bravura…
Beatriz Recari (+6) ha sido de las jugadoras más destacadas en los 18 hoyos disputados por la mañana, con una notable vuelta de 73 golpes, y si tenemos en cuenta una vez más las condiciones de juego, puñeteras y cambiantes. El viento nunca ha dejado de soplar, auque por momentos descendía algo la intensidad para volver a la carga, quizá con más fuerza. Y también han caído algunos chaparrones aislados. Día de cielo gris oscuro, desapacible y frío. Sólo se han entregado cinco tarjetas por debajo del par, mientras que ocho jugadoras han firmado las tablas.
Recari ha vuelto a ser la del jueves. Muy metida. Muy sólida y sin apenas errores. Notable en todas las parcelas del juego. Con nervio y paciencia.
A Carlota Ciganda (+8) le han ‘traicionado’ los pares 5. En ellos había obtenido una renta de seis menos a lo largo y ancho de los 36 primeros hoyos del torneo, pero hoy no ha estado fina. Curiosamente, Ciganda sólo había firmado dos birdies hasta hoy en hoyos que no fueran pares 5, y esta mañana sin embargo firmaba tres.
